En el fútbol no se puede hablar de justicia. Es una de las conclusiones que tanto el técnico visitante, Raúl Garrido, como el local, Luis Ayllón llegaron en rueda de prensa tras el partido entre sus equipos. Sin embargo, lo vivido en La Fuensanta deja un resultado en el que los blanquinegros hicieron más méritos que su rival, pero sin encontrar premio. No faltó la polémica en dos acciones discutidas en los que los locales pidieron penalti ante el colegiado Carbonell Hernández, que tuvo más protagonismo de lo esperado en el encuentro.
El choque tuvo un discurrir espeso y abrupto por lo que se planteaba en el césped, con un Olot bien posicionado y un Conquense buscando dominar la posesión y que las ocasiones llegaran a raíz de esto. Sin embargo, la tromba caída instantes antes del pitido inicial propició que parte del campo, el que defendían los gerundenses en la primera parte, tuviera botes bajos e incluso nulos cuando el esférico aparecía por la zona. Así, entre la igualdad de ambos conjuntos, los de Luis Ayllón intentaron coger la espalda a su rival aprovechando el estado del terreno.
No fue hasta la primera mitad cuando llegó el primer acercamiento con peligro. Pase al hueco de David Rodríguez y Agi se acerca a portería paralelo a la línea de fondo, pero su pase al corazón del área lo despeja la defensa rival. Dos acciones posteriores de balón parado pusieron las mejores ocasiones de los conquenses, unido a un disparo cruzado de Dambelley, el más incisivo del primer tiempo, que se fue fuera por poco por el lateral de la portería de Xavi Ginard.
Por su parte, el conjunto de Garrido tuvo su ocasión en un centro que Sergi Puig que no logró despejar acertadamente de puños, terminando el balón en córner y un disparo desviado desde la media luna del área que se fue desviado. Tras el paso por vestuarios, la Balompédica salió mejor y centró el juego en el campo de su rival. Apenas cinco minutos de la reanudación llega una de las jugadas polémicas. David Rodríguez se interna en el área su defensor trata de obstaculizarle, pero cae al césped, deteniendo el esférico con su brazo. Pese estar justo detrás, el colegiado valenciano no señala la pena máxima.
Acto seguido, Jorge prueba suerte con sendos disparos muy peligrosos pero que no cogen portería por poca distancia. Ante el acoso local, los gerundenses se defendieron y con los hombres de refresco disfrutaron de sus mejores minutos lanzando varios centros al área de Puig que se mostró seguro en el juego aéreo.
Pasada la media hora de juego, Ayllón realiza su tercer cambio dando entrada a Peláez en busca de finalización, habiendo utilizado con anterioridad a Adighibe, que entró por Agi, y Orio Rey, que salió al campo por un cargado Óscar Arroyo. Fue precisamente el jugador cedido del Leeds United quien entró en disputa por el esférico en otra de las acciones que indignaron a la parroquia local. El colegiado señala falta, pero indica en un primer momento que la acción favorece al Conquense, para cambiar su veredicto sólo segundos después. La UE Olot bota el libre directo, la zaga conquense despeja a golpe de cabeza y el balón le cae como un regalo a Marc Nierga que en el área empala la pelota y la manda al fondo de las redes haciendo el tanto para los suyos al filo del final del encuentro.
Pese a la realización de los seis cambios permitidos por reglamento para los dos equipos, apenas se añadieron dos minutos que no dieron lugar a más ocasiones. Los visitantes se llevaron en una acción aislada los tres puntos ante un Conquense que mereció más y que volvió a faltar refrendar su posesión y ocasiones en goles para la victoria.
Finalizado el encuentro, el colegiado expulsó al técnico local por protestar. En rueda de prensa, Luis Ayllón se refirió al árbitro indicando que “puede equivocarse o no, pero no es posible que les falte el respeto a los jugadores y busque el protagonismo. De la misma manera que los jugadores le deben respeto a su figura también debería ser al revés, porque cuando no es así a los jugadores se les sanciona”.
