El club conquense de billar 'Casas Colgadas' logró arrancar un empate en tierras tomelloseras gracias a un disputado encuentro ante el Club Billar Casino Tomelloso, un rival que ya el año pasado fue una auténtica pesadilla para los conquenses, pero que en esta ocasión, ofreció todo un espectáculo en esta contienda.
Los miembros del Casas Colgadas dieron la cara en un enfrentamiento complicado, donde jugaron muy bien sus bazas sobreponiéndose además a un inicio adverso hasta lograr un resultado positivo que, sin duda, les permitirá afrontar los próximos compromisos con más confianza y optimismo de cómo lo hicieron al inicio del torneo.
En el primero de los enfrentamientos, Ángel Crespo inició con soltura y desparpajo su encuentro ante el local Jesús García, dominándole en los primeros compases de juego (11-13), pero cediendo al descanso ante el lógico empuje de su oponente (15-13). Esta pausa debió sentar bien al manchego, que salió en tromba en pos del triunfo, con un juego más acorde a su categoría, que no encontró oportuna respuesta del billarista conquense, desinflado en este segundo tramo y cediendo el choque con un resultado final de 40-20.
Por su parte, Javier Mora y Triunfo González brindaron un duelo tenso e igualado, con mejores prestaciones del tomellosero al inicio, pero brillante reacción del conquense, quien dominaba al final del primer acto (15-20). ). Intentos baldíos del local por nivelar la balanza tras el receso, encontrándose con un Javier serio, disciplinado y bastante acertado en la definición, sobre todo en situaciones harto complicadas. Bajo estos parámetros, el resultado no podía ser otro que el de la victoria del deportista del “Casas Colgadas” por un holgado 29-40.
En el tercero de los envites, el conquense José Vicente sufrió una derrota sin paliativos ante un inconmensurable Víctor Mateo, en un choque siempre dominado por el anfitrión, quien consiguió una clara victoria, aunque con un tanteador excesivo para los merecimientos de ambos jugadores (40-17).
En el último asalto, el conquense Jorge Sánchez logró una sensacional victoria, con la que certificó el empate definitivo del Casas Colgadas. El billarista trabajó a destajo para controlar primero y poder superar después al talento de Cándido González, un rival que se lo puso extremadamente difícil al albaceteño del equipo de Cuenca. Finalmente, Jorge supo hacerse con los dos puntos por un ajustadísimo 39-40, lo que demuestra la emoción e incertidumbre que se vivió a lo largo del choque.
