La Primera Autonómica de Fútbol Sala arrancó de manera especial esta campaña 2019/2020 con la aparición de varios equipos de nueva creación, pero si hay uno que llama la atención por la expectación que genera cada fin de semana es sin duda el Benitense FS.
El equipo de Casas de Benítez fue un encargo del fallecido alcalde, Julián Andújar, al actual técnico Juan Plaza, para hacer resurgir la tradición y la pasión por el balón que siempre había reinado en la localidad. El club, presidido por Juan Carlos Cabrero, ha superado todas las expectativas. “Comenzamos a plantear la creación de un equipo sobre todo de cara a los más jóvenes, no teníamos campo de fútbol once, así que optamos por formar un equipo de fútbol sala”, explica el directivo, “pero nunca creímos que tendríamos tal seguimiento. Ahora mismo estamos en torno a 440 socios, y para navidad queremos llegar a los 500, porque no paramos de seguir recibiendo peticiones, la repercusión ha sido fantástica, la gente apoya, colabora y prácticamente todo el pueblo está volcado con el Benitense, incluso gente de fuera se ha hecho socia para ayudarnos en pasear nuestro escudo por Castilla-La Mancha”.
El resultado es que cada quince días el pueblo se transforma con el partido de su equipo, incluso el párroco del municipio, al que se le ve en la imagen inferior sujetando una pancarta, una vez termina la misa dominical, recuerda la cita deportiva a sus feligreses para que acudan al pabellón. “El polideportivo se nos está quedando pequeño, el pasado 12 de octubre hubo que cerrar las puertas porque ya no cabía más gente, se tuvieron que habilitar zonas en las esquinas, tal es la devoción por el equipo que el día de partido no se habla de otra cosa en el bar o las calles, ¡hasta la gente va una hora antes para coger sitio! Hemos resucitado el pueblo, además de crear una unión increíble entre los vecinos”, afirma Cabrero.
Pero este apoyo no se queda dentro de Casas de Benítez. Ya ha ocurrido que en más de una ocasión, los aficionados han acompañado a su equipo para darlo todo. “En Villarubia, cogimos un autobús de 55 plazas, entre el equipo y la directiva somos 17, el resto se llenó de aficionados y para Ciudad Real, se llenó tanto el bus del equipo como otro más, y no pedimos un tercero porque no podíamos”, explica Juan Carlos. Más de medio centenar de aficionados que no pararon de animar pese a que el Alarcos endosó un 15-0 al Benitense. Pero lejos de ese resultado, el equipo también ha demostrado ser competitivo y tras siete jornadas marcha en 5ª posición muy cerca del grupo de cabeza.
“Nuestro objetivo es quedar lo más alto posible, pero la verdadera intuición es disfrutar, el ver como los más pequeños sueñan con vestir la camiseta del Benitense, se van al polideportivo para ver entrenar a los del equipo de fútbol sala y a los jugadores y el cuerpo técnico les saludan por la calle y animan para ganar su siguiente partido”. Así, la ilusión es un motor que sigue funcionando a toda máquina para este equipo que hace vibrar a una población entera a la que ha unido y sacado de su letargo con la ambición de disfrutar del deporte. Todo un ejemplo a seguir y aplaudir en los tiempos que corren.
"Tener esta afición ayuda mucho, pero también supone una presión”El Benitense FS compite bajo el escudo e himno que en su día llevó el antiguo club de fútbol de la localidad. Ahora, Juan Plaza, técnico del equipo, es el encargado de hacer que sus chicos defiendan un legado que siempre ha estado muy vivo en este pueblo conquense.
“Hemos vuelto a florecer esa afición por el fútbol, pero no sabíamos que la competición nos iba a exigir tanto”, explica el entrenador. “Hemos dado cabida a chavales que juegan en los típicos torneos de verano y ahora tienen un equipo para hacerlo, el más pequeño es mi hijo que tiene 15 años hasta los más veteranos que sólo tienen 27 o 28 años, y unos tres juveniles, entre los que está Iván Cabrero, máximo goleador del Grupo 2 y que cuenta con un pasado notable en el fútbol pero que decidió quedarse en el pueblo para jugar en el equipo y él mismo admite que nunca ha sido tan feliz jugando al fútbol”, añade Plaza.
Así, esta plantilla que tiene detrás a más de 400 personas en cada partido, un factor que el técnico agradece pero que también señala como una presión añadida. “Tener esta afición ayuda muchísimo, pero también tiene la otra cara, cuando tienes a tanta gente mirándote, esperando que ganes, eso influye, pero es algo increíble para los chicos en la pista”. Además de acompañarlos tanto en casa como en los viajes cuando toca jugar como visitante, los aficionados han formado ya un ‘Frente Benitense’ con cánticos y lemas propios que llenan de toques comarcales y con los que ovacionan a los suyos al término de cada partido.