Trabajada victoria del Basket Globalcaja Quintanar ante el CB Pozuelo (87-73). Segundo triunfo consecutivo en casa para los conquenses, que consiguieron romper la igualdad en un encuentro muy disputado. La clave no ha sido otra que la defensa, la cual ha secado a los pozueleros y se ha visto complementada con la efectividad en ataque.
La primera parte reflejaba una igualdad casi máxima entre ambos conjuntos como prueba de lo disputado que estaba siendo. Si bien los quintanareños se iban uno arriba en el primer cuarto, el Pozuelo hacía lo propio a la hora de marcharse al descanso. Había alternativas para ambos equipos, aunque el Quintanar no estaba siendo todo lo sólido en defensa que podía llegar a ser, comenta Navarro, permitiendo canastas fáciles por pequeños errores. En ataque, eso sí, se jugaba de manera bastante fluida, lo que les permitía no perder comba.
Los pozueleros rompían el guion de igualdad en el segundo tiempo, cogiendo una renta de 7-8 puntos que dejaba atrás al Quintanar. No obstante, reaccionaron rápido, y cerrando bien el rebote –lo cual complementaron con rápidas transiciones y buenas salidas en ataque- volvieron a meterse en la pomada.
La clave estaría, comenta Navarro, en la defensa, ya que dejarían al Pozuelo en 15 y 17 puntos durante los últimos dos cuartos. “Todos los jugadores colaborando en defensa y sacrificándose”, valora el técnico. Finalmente, con esa férrea defensa pero sin renunciar a su efectividad en ataque, los locales conseguían un buen bagaje anotador para cerrar el encuentro con resultado de 87-73.
Como ya señalaba en la previa Juan Carlos Navarro, técnico del Basket Globalcaja Quintanar, se trataba de un partido de estar concentrado “los 40 minutos”, algo que los jugadores han conseguido, resaltando su coraje y profesionalidad en una semana complicada. “El techo lo tenemos en lo que seamos capaces de concentrarnos en estos partidos que nos quedan”, finaliza el técnico, comentando que su objetivo es acabar lo mejor posible.