La pista de atletismo Luis Ocaña ya cuenta con su homologación oficial y reconocimiento como instalación válida para el correcto desarrollo de las múltiples disciplinas de este deporte por parte de la Real Federación Española de Atletismo (RFEA). La noticia, ansiada durante varios meses desde que supuestamente terminaran el grueso de las reformas en el complejo deportivo por parte del Ayuntamiento de Cuenca, supone “un impulso necesario para el atletismo conquense”, tal y como defiende Miguel Ángel Castillo, técnico del Club Atletismo Cuenca.
Los principales beneficiados son el grueso de atletas de la capital y la provincia que, para conseguir su plaza en las pruebas nacionales de la RFEA, debían viajar siempre a otras provincias o Comunidades Autónomas (Madrid y Valencia en la mayoría de ocasiones) para competir en instalaciones que les permitieran registrar marcas oficiales. “Ahora, si el club u otra iniciativa así lo desea, podemos montar nuestro propio control de marcas para que los registros de las pruebas sean válidos. Además, en el deporte escolar, todos los registros de los y las chicas que competían aquí no servían para nada, en el momento que vuelva a haber competiciones escolares, sí contarán con esa opción”, explica Castillo.
Esta realidad con la homologación de la pista podría servir para acoger pruebas de carácter regional y nacional como el Campeonato nacional sub-16 que evitó la irrupción de la pandemia en 2020.
No obstante, más allá del optimismo generado por la noticia, en el club son conscientes de la complicada temporada que se avecina. Todas las competiciones están supeditadas a las decisiones de Sanidad y el hecho de que se haya eliminado un gran número de pruebas de calendario regional que servían para lograr el pase a los Campeonatos de España, dejan en un limbo a los atletas conquenses que dependen de sus marcas de hace dos años o de alguna repesca por parte de la RFEA. Esto afecta directamente tanto a los marchadores de Dori Ramos, como a los atletas de campo a través para los campeonatos escolares, al carecer de éstos Castilla-La Mancha por la pandemia.
Pero, por muy mal que vengan dadas, en el club ven con optimismo el paso adelante que se ha dado para dar viabilidad a un deporte que lleva dando alegrías muy importantes para la ciudad de un tiempo a esta parte, resaltando el potencial y el gran trabajo que se realiza sobre la ya pista homologada del Complejo Deportivo Luis Ocaña.
La amplitud de registros que abarca el Club Atletismo Cuenca hace que durante toda la semana, la pista azul del Luis Ocaña acoja tanto a pequeños aprendices que comienzan sus primeros pasos en el atletismo mediante las escuelas del corredor, hasta mayores que disfrutan del asesoramiento y posibilidad de entrenarse y practicar su afición en un entorno homologado, pasando por los conocidos deportistas de las categorías base del club que incrementan año a año su extenso palmarés.
Manuel Caballero o José Cano (vallas), Daniel Belinchón (salto de altura), Alejandro Palomero (lanzamiento de jabalina), o los medio fondistas y fondistas como Guillermo Ballesteros, Alonso Paños, Sergio Algarra, Germán Barro, Fran Sevilla (Surco Lucena) o Mesfin Escamilla utilizan la pista para prepararse y dar la talla en las grandes citas nacionales. Todo ello sin olvidar la camada de marchadores como Sara Herraiz, Nara Pastor, Nicolas Cañizares, Lydia Ballesteros, Adrián Sevilla o Asier Díaz que han tenido como referencia la figura de Pablo Pastor, marchador actualmente del Club Atletismo Surco Lucena.
