Visiblemente emocionada llegaba a la línea de meta Alba Reguillo, ganadora de la 35ª edición de la Carrera Hoz del Huécar. Una vez recuperado el aliento, ofrecía sus impresiones acerca de esta cita tan especial.
“No quiero decir palabrotas, pero qué pasada de prueba”, comenzaba contando entre risas. Buena conocedora de Cuenca, pues ya estuvo en un club local, además de ser ganadora del triatlón en 2016, declara que ha sido todo un acierto trasladar la carrera a horario vespertino, destacando el bonito punto de animación dispuesto en la Catedral. “Bravo, viva Cuenca, cómo se nota que se vive la pasión por el deporte”, comenta Alba.
No sabía bien cómo iba a responder el cuerpo, ya que llegaba en calidad de subcampeona de España tras una carrera de 100 kilómetros, por lo que le aquejaban algunas molestias musculares. No obstante, se percibe como “más diésel” y es por eso que, conforme avanzaba la carrera, se sentía mejor y veía que podía hacerse con la carrera. “Tenía miedo de romperme en la bajada, pero es que el público ha hecho que se me olvidase lo que tenía”, bromea.
Agradece que el club Trote Gorrinero le ha recibido maravillosamente y que “parece que corro en casa”, por lo que no duda en volver “todas las veces que pueda”.
