El Casco antiguo acogió el pasado fin de semana un intenso programa de actividades, entre ellas se hizo notar la celebración del V Festival de Artistas de Calle Conka Street. Estaba organizado por las Asociaciones de “El Canto del Gallo” y “Amigos del Teatro” de Cuenca con el patrocinio principal del Ayuntamiento de Cuenca y el Consorcio de la Ciudad de Cuenca.
El Festival conto con una gran afluencia de público que alcanzó los 6.000 espectadores entre todos sus espectáculos y actividades paralelas. Desde el primer momento se comprobó que había interés entre el público y los espectáculos programados no defraudaron.
Empezó el viernes con un poco de retraso que enseguida se transformó en admiración y sorpresa con las evoluciones del diábolo y las verticales por parte del artista Little Testa. Continúo Javi Malabares con su habilidad para hacer partícipe al público menudo del propio escenario, cosa que fue bien agradecida por los asistentes. Hilton y Pelito pusieron su comicidad con el pretexto de la ciencia hasta hacer olvidar el desafío deportivo con el que competía en horario el Festival.
Por la noche Aldeium, La Rosa de los Vientos solo los pudieron dar un pequeño aperitivo de lo que sería su hermoso show de danza al día siguiente; los problemas técnicos y el viento se encargaron de dejarnos con la miel en los labios. Sobre la media noche los Títeres Cacaramusa y su “Orquesta de instrumentos reciclados” se encargaron de dejar una muestra de su buen hacer con un espectáculo apoyado en el gusto musical de unos títeres cargados de expresividad. Para finalizar la jornada la madrileña banda Ukulele Clan Band estuvo deleitándonos con su repertorio original y acústico en el maravilloso graderío de San Miguel.
La jornada del sábado estuvo plagada de actividad desde la mañana con la diana de los conquenses Pipirigay haciendo bailar sus temas tradicionales de siempre, incluso a todo tipo de concentración motera que cruzo el Casco Antiguo. La Asoc. Cuencantada, también estuvo a la altura con sus Payasos Lalala. Continuamos con nuevas representaciones de los artistas visitantes incorporándose una delicada artista de calle, Patty Diphusa son su “Hartista Contemporanera”, mostrando fragilidad y energía en un show plagado de locura y recursos circenses. Para rematar la noche los últimos momentos vinieron de la mano de una gran actriz: Jimena Cavalletti que cautivo al abarrotado auditorio de San Miguel, con su original espectáculo “Mecha Show you”, plagado de humor físico, crítica social, frescura interpretativa, energía vital, e interpelaciones al público. Para finalizar la noche teatrera en San Miguel el Cabaret Participativo repartió desternillantes momentos de humor para adultos sin complejos.
En esta ocasión las actividades complementarias además de decorar algunos recovecos del Casco con los trabajos del colectivo Aframas, estuvieron dedicadas el sábado al público juvenil con una Muestra de Pintura de grafiti coordinado por Asociación Lamosa y sesiones de música joven a cargo del Colectivo Cuenca Rap y Dijey Fatha, tomando una calurosa Plaza de Mangana entre botes de pintura en espray y poesía joven, eso si con mucho “flow”. Estas actividades despertaron la admiración del curioso público que por allí se acercó, propiciando incluso bellas imágenes que se podrán ver en un futuro reportaje de Tv española estuvo
gravando sobre nuestra ciudad, un orgullo también para el Festival, el que su propuesta cultural sirva para dar algo más de lustre a la imagen de nuestra ciudad.
El domingo fue el último día en el que se pudo disfrutar de nuevos pases de artistas de calle que culminaron con la actuación del gran Tornillo Magic Clown que repetía en el Festival dado el gran éxito obtuvo hace unos años y que volvió a repetir con su humor sin complejos, a la vez tierno y sagaz, repleto de una espontaneidad natural como pocos y de locura vital.
En resumen una edición cautivadora del principio al final con espectáculos divertidos y sorprendentes, con una programación variada, planificada para sentirla sin agobios, que deja espacio a todo lo demás que puede mostrar el Casco Antiguo, que pone su punto de color y de alegría, sin grandes pretensiones pero con la seguridad de ir calando poco a poco en el gusto por vivir alegremente en esta ciudad de la piedra y el agua, del vértigo y la poesía.
Por ultimo agradecer a todos aquellos que hacen posible este Festival, a las instituciones por su apoyo y también a los voluntarios que con su trabajo desinteresado permiten que Conka Street pueda ver la luz un año más.
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