La iglesia de la Merced ha acogido esta mañana la presentación del portal turístico Tesoros de Cuenca. Una iniciativa pionera de la diócesis de Cuenca para dar a conocer el patrimonio artístico, cultural y natural de la provincia contribuyendo así también a frenar el problema de la despoblación.
Una presentación que ha estado apadrinada por la periodista conquense y jefa de Nacional de Antena 3 Noticias, Pilar M. Ruipérez, y que ha contado con la presencia del obispo, Monseñor José María Yanguas, y numerosas autoridades religiosas, militares y civiles.
Tesoros de Cuenca nace de la idea, apuntan, de que lo que no se conoce no se puede apreciar y disfrutar, por lo que el punto de partida es una web, pero no una web turística al uso.
Además de hablar de los lugares de interés turístico Tesoros de Cuenca va más allá y enmarca esos lugares en su historia a lo largo del tiempo. Pero sobretodo en la intrahistoria, en un universo de pequeñas historias desde un enfoque multidisciplinar en el que se entrecruzan el arte, los avances sociales, la medicina y la ciencia, entre otras cosas. De esta forma el visitante pueda sumergirse en el pasado de nuestra provincia y entenderlo con tanta claridad como si lo estuviera viviendo en primera persona.
El binomio turismo-Iglesia resulta esencial para ambas partes: por un lado, la Iglesia conserva nada menos que el 80% del patrimonio histórico en España, por lo que el turismo se basa en gran medida en estos activos como parte indispensable de promoción de una región. Por otro lado, el turismo es para la Iglesia una herramienta de divulgación de su labor y de protección de su patrimonio histórico.
La web Tesoros de Cuenca es solo el punto de partida. Tras despertar ese interés por Cuenca se busca que la visiten, y no de cualquier manera. Esta iniciativa de la diócesis de Cuenca quiere dejar huella, y para ello propone una nueva forma de viajar, una forma más auténtica en la que las personas puedan desconectar de verdad de las prisas y la rutina diaria para experimentar nuevas sensaciones o recuperar otras ya olvidadas, respirar y reconectar con su propio yo, al que muchas veces llevan tiempo sin escuchar por todo el ruido que les rodea.