Tras más de una semana llena de conciertos y actividades musicales entre las que cada año cuesta más decidirse por cuál es mejor, se antoja no menos sencillo elegir un espectáculo a la altura para poner el cierre de un festival. The Excitements correspondió a la perfección tan prestigiosa papeleta en una despedida cargada de soul, rythm&blues y una locura de directo en la que su vocalista, Kissia San, se hizo sentir conquense como un espectador más.
La vuelta del ciclo artístico y musical conquense a un espacio como el escenario Atperson del Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha, tras no poder disfrutar de las imponentes vistas del Casco Antiguo conquense por obras en el espacio el pasado verano, puso los cimientos para otro de los cierres inolvidables.
The Teacher´s Band hizo acto de presencia en el escenario para sumar su undécima edición con Estival Cuenca. El grupo conquense con origen académico siguió cumpliendo fiel a su cita con composiciones propias de rock y otras más tradicionales como su tema “Cuenca es Música”. Interpelados por su público para los bises, el grupo conquense se marcó todo un homenaje a Tina Turner, fallecida en mayo, versionando varias de sus canciones en una misma interpretación. Todo un homenaje con toque conquense para una de las más reconocidas figuras del género.
Acto seguido, llegó el turno del grupo barcelonés The Excitements. Con más de una década de música y conciertos en el ámbito nacional e internacional, llegaban a Cuenca apenas un día después de actuar en San Sebastián. Una vibrante puesta en escena presentada por el guitarrista y cofundador de la banda, Adrià Gual, aterrizó en Cuenca para transmitir su sonido influenciado del R&B de finales de los cincuenta y el poderío del sonido Stax de los sesenta.
Un directo cargado de energía y liderado por Kissia San, quien no tuvo reparo en bajar del escenario para bailar junto al público conquense mientras animaba a sus compañeros en el escenario. La vocalista fue todo un nexo entre el público y el escenario, transmitiendo un torrente de voz y vibraciones a la que los espectadores siguieron movidos por el sonido “Excitement”.
De esta forma, Estival Cuenca puso todo un broche de oro a su duodécima edición, sobrepasando una vez más las expectativas en cuanto a la recepción del público y la calidad de los artistas llegados a la ciudad. Una apuesta a la que se suman el gran número de talleres iniciativas culturas que completan el ciclo conquense, y que continuarán en noviembre con el IV Encuentro Internacional de Docentes de Música y las XII Jornadas de Didáctica de la Música y la Musicología, previstas para noviembre.