Un buen lugar para descubrir nuevos artistas es aquel donde estos aprenden y se forman. Por esto, la Facultad de Bellas Artes es y será cuna de grandes creadores aún en periodo de formación. Pero, ¿qué será de estos artistas si nadie disfruta y compra sus producciones? Ante esta cuestión, Carmen Fragoso y Lua Paz, dos compañeros de cuarto curso, han puesto en marcha La Mercadilla.
Se trata de un espacio donde venden ilustraciones, fanzines, pegatinas, cómics, viñetas e incluso postres caseros que cumplen todas las medidas Covid realizados por ambos y por una veintena de artistas que ya colaboran en esta propuesta.
Una idea que llevan madurando desde el año pasado aunque el cierre de la Universidad de Castilla-La Mancha por la llegada de la Covid-19 impidió su realización. Sin embargo, este nuevo curso la idea ha vuelto con más fuerza tras haber adoptado un gato abandonado y tener que cubrir las necesidades del mismo para mantenerlo sin apuros económicos y no lo dudaron, comenzaron a vender sus producciones.
Además, es una buena oportunidad para entrar en el mercado laborar porque “los estudiantes no vivimos del aire y también necesitamos tener ingresos” y para ellos es importante darse a conocer al resto de comercios y galerías para tener oportunidades profesionales en un futuro cercano.
Hasta las vacaciones de Navidad montarán La Mercadilla en el pasillo central de la Facultad de Bellas Artes todos los miércoles desde las 12:30 hasta las 16:00 horas, pero con el inicio del segundo cuatrimestre puede que cambien la organización a los martes porque “necesitamos compaginarlo con nuestras clases”, destacan Carmen y Lua.
Con la mirada puesta en el resto de Facultades del Campus de Cuenca esperan poder trasladar esta iniciativa por todas ellas para que el resto de la comunidad universitaria les conozca y pueda unirse al proyecto, aunque por ahora solo cuentan con el apoyo de su decano y profesores.
Cada semana La Mercadilla crece porque con apenas dos semanas de vida ya son muchos estudiantes los que se han interesado tanto en la propia Facultad como a través de su cuenta de Instagram donde, además, divulgan todo el contenido del que disponen.
Por ahora, pretenden abarcar solo el ámbito universitario aunque no descartan, si todo va bien y tienen buena acogida, llegar a otros puntos de la ciudad.