Como un sentido reconocimiento al insigne escultor conquense Luis Marco Pérez. Así se ha concebido la exposición titulada ‘Marco Pérez. De la figura humana a la imagen procesional’, que desde este miércoles y hasta el próximo 24 de abril ha abierto sus puertas en la Sala Iberia de la capital, junto a la exposición de una colección inédita de obras del escultor en el Museo de Cuenca y un recorrido por distintas iglesias de la ciudad que también albergan sus esculturas.
La Sala Iberia ha sido el escenario elegido para la inauguración oficial de esta muestra, en la que la delegada de la Junta en Cuenca, M. Ángeles Martínez, ha mostrado su satisfacción por este “merecido homenaje de la ciudad de Cuenca a este magnífico autor”.
Un homenaje de todas las instituciones –Gobierno regional, Diputación y Ayuntamiento- que, tal y como ha recalcado, ha contado con la inestimable colaboración de la Junta de Cofradías de la Semana Santa de Cuenca y del Obispado, y en la que ha jugado un papel fundamental la donación de Lamberto Pérez a la Junta de Comunidades de una colección inédita de obras del escultor conquense, que otorgan un plus a este reconocimiento.
Desde la Junta de Cofradías, su vicepresidente, Antonio Abarca, no ha dudado en agradecer esta exposición sobre “el imaginero por antonomasia de la Semana Santa conquense” y, más si cabe, ante la proximidad de la Semana de Pasión.
Es por ello que no ha dudado en invitar a los nazarenos a visitar estos dos espacios expositivos y a recorrer las iglesias con obra de Marco Pérez para conocer más en profundidad la figura de este genial artista. Llamamiento que ha hecho extensivo a los nazarenos más pequeños para participar en la ruta que se ha diseñado en torno a Marco Pérez, de tal manera, que puedan descubrir al magnífico imaginero de Fuentelespino de Moya.
Con esta doble exposición, comisariada por Antonio Garrote y el Grupo Desenfoque, se pretende acercar al público en general la figura de Luis Marco Pérez, más allá de su faceta de imaginero religioso, mostrando, asimismo, su vertiente puramente escultórica, de la que hay bastantes ejemplos a lo largo y ancho de la capital.
De ahí que esta exposición, que tiene un marcado carácter didáctico, ofrezca la triple posibilidad de acercarse al derrotero vital y plástico del artista mediante las imágenes fotográficas y videográficas instaladas en la Sala Iberia, a su hacer escultórico y dibujístico en la pequeña muestra ubicada en la Sala de Exposiciones Temporales del Museo de Cuenca, en pleno Casco Antiguo, y a su tan característica imaginería religiosa mediante su disfrute en los propios recintos de culto, concretamente, las iglesias parroquiales de San Esteban, Virgen de la Luz, El Salvador y San Pedro, que albergan sus tallas que así pueden ser contempladas en la ubicación más adecuada para su simbolismo sacro.
Dentro de ese carácter didáctico, a estas dos exposiciones hay que sumar una actividad diseñada específicamente para los más pequeños, bajo el título de “Ruta de Marco Pérez”.
Esta pequeña guía ofrece un recorrido por los puntos donde se pueden encontrar otras obras del artista, algunas diseminadas por toda la ciudad –El Pastor de las Huesas del Vasallo, el monumento a los soldados conquenses muertos en la guerra de África o la escultura de Chicuelo II, entre otras– y otras exhibidas en las salas dedicadas al escultor en el Museo de la Semana Santa. Una guía que, además, incorpora una serie de juegos y preguntas que les dan la posibilidad de participar en un sorteo para conseguir un premio.
