Después de años paralizado, el parking de Astrana Marín ya ha abierto sus puertas esta semana en pruebas para verificar que todos los sistemas funcionan correctamente. Según la empresa concesionaria de esta infraestructura, no se han registrado incidencias aunque todavía no han sido muchos los que se han animado a utilizar este espacio, que cuenta con 294 plazas, incluyendo tanto de rotación como de concesión administrativa durante cuarenta años. Ahora se está a la espera de que el Ayuntamiento de Cuenca pueda recepcionar las obras de la urbanización exterior para que la apertura sea ya definitiva.
El gerente de la concesionaria del servicio (Herce ICR Aparcamientos), Javier Ovalle, achaca la escasez de público de estos primeros días tras la apertura a que quizás mucha gente no se había enterado de que ya puede utilizarse pero, sobre todo, cree que se debe a que estamos en unas fechas estivales en las que quedan pocos conquenses en la capital.
El parking cuenta con dos plantas: en la altura menos uno hay 167 plazas, que están destinadas a la rotación; y 127 en la planta menos dos, que son las que están disponibles para comercializarse. Ovalle precisa que ya se ha hecho entrega de las plazas a los propietarios que compraron, que están recogiendo sus tarjetas de acceso a la infraestructura.
Objetivo
El gerente de Herce ICR Aparcamientos detalla que, de las 127 plazas disponibles para la comercialización, ya hay 60 vendidas, incluyendo las 15 que el Gobierno regional cederá al IES Alfonso VIII. “El objetivo era llegar a al menos 80”, matiza el representante.
Javier Ovalle explica que la intención de la concesionaria es que se puedan ofrecer a los ciudadanos como abonos de 24 horas el resto de las plazas del aparcamiento que no se vendan.
“Esperamos que la gente se anime a comprar plazas. Es un parking moderno”, subraya Ovalle. No obstante, reconoce que pueda haber “desconfianza” por parte de los ciudadanos debido a todos los problemas que ha tenido el parking desde que se inició el proyecto. “Pero ahora ya es una realidad”, recalca.
Urbanización exterior
Una vez que se ha comprobado el funcionamiento cotidiano del aparcamiento en cuestiones como las tarjetas, las balizas y el sistema de acceso de los vehículos, entre otros aspectos, verificándose que no hay fallos, solo quedaría que el Ayuntamiento de Cuenca recepcione las obras de la urbanización exterior de la infraestructura, que ya se han finalizado también.
El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, explicó a los medios el lunes que los técnicos municipales estaban visitando el espacio para ver si se podían recepcionar las obras de urbanización de las dos calles que están afectadas por el parking, Astrana Marín y Lope de Vega, y verificar si todo el entorno es accesible.
En cuanto el Ayuntamiento recepcione las obras, la apertura del parking ya no será de forma provisional. “En unos días se podrá”, confiaba el gerente de la concesionaria.
Varios accesos
El parking tendrá una entrada para vehículos por la glorieta González Palencia y otro acceso de entrada y salida para vehículos por la Avenida de la República Argentina. Además, contará con varios accesos para las personas y la calle Astrana Marín será totalmente peatonal.
Hay que recordar que la construcción del parking se inició en 2010 pero fue paralizada un año después. Así, las obras estuvieron más de ocho años paradas hasta su reactivación en la pasada legislatura. El proyecto disponía de un presupuesto de 2,9 millones de euros.
