El Ayuntamiento de Cuenca ultima estos días, con la instalación de nuevas señales tanto horizontales como verticales, el plan de bacheado puesto en marcha en los días previos a la Semana Santa, una inversión de 630.000 euros con cargo a la empresa de la ORA que consiste en reasfaltar un total de 45 calles y avenidas de la capital, entre ellas algunas tan concurridas como Princesa Zaida, República Argentina, Fray Luis de León o el parque de San Julián.
Se trata, eso sí, de un plan de asfaltado, el tercero de esta legislatura, que al igual que los dos anteriores prevé actuar exclusivamente en la calzada, algo necesario dados los no pocos socavones que en los últimos años han ido apareciendo en las carreteras de la ciudad como consecuencia de la falta de mantenimiento, pero que en cambio no contempla ninguna actuación en las aceras, también en un estado muy deteriorado por idéntica razón con la única excepción de los dos barrios recientemente renovados en su totalidad, Las Quinientas y San Antón.
Así lo consideran varios representantes vecinales consultados por Las Noticias, que señalan que precisamente una de las calles donde se ha actuado, Princesa Zaida, cuenta con un tramo de acera con las baldosas muy deterioradas. Y algo similar ocurre en sus proximidades, como por ejemplo en las muy concurridas Colón y República Argentina, esta última con baldosas levantadas en las que los peatones, cuando no tropiezan, se mojan estrepitosamente si las pisan en los días de lluvia.
En opinión del presidente de Fuente del Oro, Antonio Gómez, las aceras deberían ser una prioridad del equipo municipal, junto a lo que añade la necesidad de revisar los sumideros, “la mayoría atascados” como a su entender se ha podido observar en las últimas y lluviosas semanas. Unas mejoras que a su entender no tendrían por qué ser más costosas y harían que la ciudad luciera más.
El caso más notorio es el de Carretería, que en seis años ha registrado dos intervenciones en la calzada, una para instalar las tablas y otra para retirarlas y, en su lugar, acondicionar unos espacios para las terrazas, pero ninguna en las aceras, salvo la sustitución puntual de alguna que otra baldosa rota, un hecho que para muchos hace que la imagen del centro comercial de la ciudad, pese a las inversiones realizadas, la última de entorno a 160.000 euros, no levante cabeza.
A ello hay que añadir el “olvido” de las céntricas Sánchez Vera, Cardenal Gil de Albornoz y Doctor Chirino, peatonales desde 2012 (en la última se permiten no obstante el paso de autobuses y taxis) pero con su aspecto anterior, con las aceras con bordillos sobre la calzada que además de dificultar el acceso de las personas con problemas de movilidad le dan aspecto de vías abiertas a la circulación. Se da además la circunstancia de que en Sánchez Vera han cerrado o se han trasladado varios negocios en los últimos meses, mientras que en Doctor Chirino los hosteleros denuncian el riesgo que corren los clientes de sus terrazas, a cuyo lado pasan vehículos autorizados sin que haya ningún vallado ni línea que delimite el espacio de terrazas, en plena calzada, del carril por el que está permitido el tráfico rodado.
Reforma de calles
Las últimas grandes reformas de calles se produjeron en San Antón, gracias al plan Urbana con fondos europeos que el Ayuntamiento recibió en la legislatura 2007/2011, y en Las Quinientas, en este caso en la 2012/2015 aprovechando la renovación que se llevó a cabo de la deteriorada red de agua con fondos de la empresa municipal Aguas de Cuenca.
Más allá de estas dos acciones aisladas, en 2008, gracias a los fondos del Plan E de Zapatero, se renovaron las aceras en zonas de la ciudad como Reyes Católicos, pero con un pavimento muy criticado al que la suciedad se agarra con suma facilidad y que resulta muy complicado limpiar.