Vecinos de la calle Juan Gómez de Mora de la capital exigen al Ayuntamiento de Cuenca la retirada de un tejado de uralita que cubre parte de un local “semiabandonado” de propiedad municipal situado en el número 4 de la Avenida Reyes Católicos y que desde hace más de treinta años linda con una de sus viviendas.
Según los vecinos, el citado tejado “no ha sido limpiado jamás” y, además de acumular suciedad, atrae insectos que en ocasiones se introducen en una de las viviendas de la calle, lo que consideran que supone un riesgo para sus habitantes.
Entienden que su limpieza no sería no obstante suficiente para resolver el problema, ya que al tratarse de un tejado de uralita contiene amianto y es deber de la administración retirarlo, pues según su información desde diciembre de 2001 en España está prohibido construir con uralita y en 2013 se aprobó una directiva europea que sienta las bases para la obligación de retirar el amianto instalado.
“Más peligroso aún que la propia suciedad es el tiempo que lleva instalada la uralita, que se halla en pleno deterioro, lo que nos expone a la inhalación de partículas de amianto en suspensión, liberadas en el aire, que producen enfermedades graves e incurables, como la fibrosis pulmonar o el cáncer de pulmón”, señalan.
Para resolver esta situación, aseguran haber contactado con la Consejería de Sanidad de Castilla La Mancha, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) y la empresa Amiantostop, “donde hemos sido informados de que los organismos públicos están obligados por ley a retirar la uralita de sus edificios, cuando esta ya está deteriorada. Todos nos aconsejaron dirigir un escrito al Ayuntamiento de Cuenca, con la seguridad de que nuestro problema sería resuelto”.
Según aseguran, presentaron en el Consistorio la petición de que el tejado fuera retirado con fecha del pasado 20 de septiembre y, tras intentar, sin éxito, ser atendidos por el técnico de Obras, Juanjo Arteaga, el 28 de octubre mantuvieron una reunión con los concejales de Limpieza y Obras, “quienes tras escucharnos y ver las fotografías nos dijeron que teníamos toda la razón y que se pondrían en contacto con nosotros para resolver el problema”. Sin embargo, lamentan que, pasado ya mes y medio, “no hemos recibido ninguna comunicación”.
Aseguran que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 100.000 personas mueren al año por diferentes dolencias provocadas por el amianto, mientras que el Comité Científico de Toxicología y Medio Ambiente de la UE considera que “hay suficiente evidencia de que todas las formas de amianto, incluido el crisotilo, son cancerígenos en los seres humanos”. Un reciente trabajo, publicado en la revista BMC Cáncer, señala que entre 2006 y 2011 en España fallecieron 1.200 personas debido a un mesotelioma pleural provocado por el amianto.
“Todos somos conocedores de las enfermedades y muertes causadas por el amiantoen el metro de Madrid, o las noticias sobre profesores en huelga que dan clase en el jardín porque los tejados de los centros son de uralita”.
