A las 17.50 horas, el lanzamiento del tradicional cohete desde el balcón del Ayuntamiento anunciaba la salida de los corrales de la primera de las seis vacas enmaromadas de la ganadería de Juan Vicente Mora que se han corrido en la primera tarde de San Mateo 2017.
Una vaquilla que, al igual que la siguiente, se han mostrado muy mansas y muy lentas, dando poco juego a las decenas de corredores participantes, debido a sus constantes resbalones sobre todo al inicio del recorrido, en la bajada de la Plaza Mayor.
Ello no ha sido óbice para que, en una agradable tarde, los conquenses hayan dejado patentes sus ganas de fiesta, tanto a la entrada de los bares, como en los balcones de los edificios que dan a la plaza, con la vaca por la calle y también en los descansos, que han estado amenizados por los pasodobles de la Banda Municipal de Música de Cuenca y la charanga Los de la Vaca, de Pozorrubio de Santiago. Durante toda la tarde han intercalado la interpretación de piezas tradicionales como Qué bonita es la amapola o el típico San Mateo, con otras más contemporáneas como Despacito e incluso el cumpleaños feliz, dedicado a un peñista.
Se trata de las seis primeras vacas de las quince que se correrán a lo largo de los cuatro días de San Mateo.
Se trata de las seis primeras vacas de las quince que se correrán a lo largo de los cuatro días de San Mateo.
