El Ayuntamiento de la capital se ha comprometido a intervenir de manera integral en el barrio de Casablanca con el fin de subsanar las deficiencias que determinen los servicios técnicos municipales, así como a seguir llevando a cabo acciones puntuales más urgentes.
Este ha sido el acuerdo final al que han llegado todos los grupos políticos con representación en el Consistorio durante el Pleno ordinario de este jueves, a raíz de la moción presentada por Ciudadanos (Cs) en demanda de una intervención urgente en esta barriada para solucionar sus muchas deficiencias.
Unanimidad que, sin embargo, ha llevado consigo la incorporación a dicha moción de la propuesta del Grupo Socialista para que sean los técnicos municipales los que determinen cuáles son las deficiencias a subsanar, lo que no ha supuesto inconveniente alguno para la concejal de la formación naranja, Cristina Fuentes, porque “lo importante aquí es que se mejore de una vez este barrio, que, sin duda, es uno de los más deteriorados de la ciudad”.
Fuentes ha planteado en dicha moción la necesidad de intervenir con urgencia en esta zona ante el avanzado estado de deterioro de muchos de sus espacios públicos, haciendo mención especial al edificio del número 2 de la calle Diego Jiménez, que el pasado 18 de mayo sufrió el desprendimiento de parte de su cornisa. Suceso que, a su juicio, hace necesaria la demolición de dicho inmueble o, en su defecto siempre que sea técnicamente recomendable, su rehabilitación con el fin de que deje de ser un peligro para todos.
Ante tal apreciación, la concejala de Urbanismo, Nelia Valverde, ha querido aclarar, en relación a dicho edificio, que, en primer lugar, “no está declarado en ruina, porque nadie lo ha pedido formalmente”, si bien, según ha recalcado, sí se ha incoado un expediente de ejecución a raíz del derrumbe parcial del alero para que los propietarios lo arreglen. Es por ello que considera que aún no se puede hablar de demolición o remodelación, porque, tal y como ha puntualizado, habrá que ver primero las alegaciones de los propietarios y si se niegan o dilatan los plazos, se tendrá que valorar si cabe ampliar a declaración de ruina e imponer multas coercitivas. En todo caso, deja claro que es indispensable que se resuelva el expediente para ver qué se puede hacer.
La titular de Urbanismo también ha querido informar de las acciones puntuales que está llevando a cabo el Consistorio en el barrio de Casablanca. Y es que, según ha dicho, esta actuación integral no está reñida con intervenciones puntuales, como por ejemplo, la reparación que se ha realizado del pavimento y una arqueta de la plaza de Inocencio Rodríguez o la próxima intervención en la zona de la entrada del colegio de Casablanca, que “ya está contemplada en el contrato de pequeñas reparaciones suscrito con la empresa Aguas de Cuenca”.
Ha querido, igualmente, anunciar el proyecto de reparación o sustitución de las tapas de la red de alcantarillado del Paseo de San Antonio o la mejora del vallado de separación de la acera y la calzada en esa misma calle. Intervenciones todas ellas demandadas y que ya están contempladas para su ejecución.
Unidad, por lo tanto, de todos los grupos políticos ante la necesidad de mejorar el barrio de Casablanca y que, según ha recalcado Fuentes, “sus vecinos se sientan cuidados por su Ayuntamiento como cualquier otro conquense”.
