
El gerente del Área Integrada de Cuenca, José Antonio Ballesteros, ha destacado que el proceso de mudanza al nuevo hospital que arrancará el próximo lunes, 28 de abril, se estructurará en seis fases, siendo el traslado del servicio de urgencias el que marcará el punto culminante del proceso.
Será el momento en que se activarán todas las unidades hospitalarias vinculadas —quirófanos, UCI, hospitalización, pruebas invasivas—. Esa última fase, que el gerente ha calificado como “el momento verdaderamente crítico”, coincidirá con el cierre definitivo del servicio de Urgencias del Hospital 'Virgen de la Luz' y la apertura de las nuevas Urgencias en el Hospital Universitario.
“Será una fecha marcada con día, hora y minuto, porque en ese momento activaremos toda la capacidad hospitalaria. En este sentido, Ballesteros ha detallado que el traslado de las Urgencias implica mucho más de lo que se ve. “Posiblemente haya que realizar una intervención quirúrgica, un ingreso hospitalario, un traslado a UCI o una prueba diagnóstica cruenta. Esa fecha marcará la activación integral del hospital”, ha explicado Ballesteros.
El gerente ha insistido en que el objetivo no es cerrar de golpe el Hospital Virgen de la Luz, sino vaciarlo progresivamente. “Tenemos entre 230 y 240 pacientes hospitalizados de forma habitual. Gracias a una estancia media modélica de 4,77 días, podemos evitar traslados masivos, dando altas de forma progresiva y comenzando a ingresar directamente en el nuevo hospital desde el momento en que abramos las Urgencias”.
Este enfoque permite, según Ballesteros, un traslado hospitalario “razonablemente cómodo” y con todas las garantías. En este proceso, el papel del servicio de Admisión será clave. “Estamos hablando de decenas de miles de citas y revisiones. El año pasado se atendieron más de 180.000 consultas de revisión y más de 80.000 primeras visitas” No todas cambiarán de ubicación, pero muchas sí, y por ello ha indicado que ya se está estamos trabajando para que cada paciente reciba su nueva citación de forma personalizada.
En el CECOT (Centro Coordinador del Traslado) que dirige el proceso están definidas todas las áreas necesarias para garantizar que el cambio se produzca con seguridad y precisión, manteniendo la calidad asistencial en todo momento.
PLANIFICACIÓN
La previsión es cerrar la atención en el Virgen de la Luz en un determinado servicio un jueves, y durante el viernes, el fin de semana y el lunes, llevar a cabo todo el traslado logístico y organizativo que implica ese servicio.
La jornada del lunes finalizará con la realización de pruebas técnicas en los sistemas informáticos, con el objetivo de verificar el correcto funcionamiento de la infraestructura digital. “Y el martes ya estaremos atendiendo al primer paciente en el nuevo hospital”, ha afirmado.
Toda la información relativa al calendario de traslados se irá comunicando a través de una página web específica que se habilitará al efecto. Esta plataforma incluirá también un teléfono de contacto atendido por un centro de llamadas, formado por profesionales perfectamente capacitados y con conocimiento detallado del proceso.
“Desde el primer día, el call center funcionará las 24 horas, porque sabemos que a los pacientes las dudas les pueden surgir en cualquier momento del día”, ha asegurado el gerente.
En cuanto a la distribución interna, Ballesteros ha destacado que el nuevo hospital se ha diseñado con cuatro grandes galerías bien diferenciadas: dos exteriores para el uso de ciudadanos y acompañantes, y dos interiores para uso exclusivo del personal sanitario. “Aunque el edificio es enorme, con casi 75.000 metros cuadrados, los circuitos están claramente definidos”, ha subrayado. Además, ha confirmado que se reforzará la orientación al usuario durante las primeras semanas con personal de apoyo desde los aparcamientos hasta las distintas áreas asistenciales.
El nuevo complejo dispone de cuatro aparcamientos con capacidad para un total de 1.000 vehículos, todos ellos en superficie y de acceso gratuito. Ballesteros ha señalado que será el personal administrativo de los centros de salud quien oriente a los pacientes sobre en qué zona del hospital deben aparcar en función del servicio al que acudan.
En colaboración con Atención Primaria, ya se ha comenzado a formar a los 56 administrativos que trabajan en unidades administrativas, quienes han visitado el nuevo hospital para familiarizarse con su estructura.
Ballesteros ha destacado la complejidad del proceso, pero también la preparación y el compromiso de todo el equipo profesional: “Nos metemos en una fase de entrenamiento, de conocimiento, de adaptación, para que cuando llegue el primer paciente, todo funcione con la máxima calidad y seguridad”, concluía.