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UGT celebra un acto para reivindicar políticas eficaces en la lucha contra la violencia de género
Con motivo del Día Internacional para la Violencia de Género, la Federación de Servicios Públicos de UGT (FeSP-UGT) en Cuenca, celebró en la noche del pasado jueves en la cafetería del Teatro Auditorio de la capital un acto dirigido a sus representantes en las empresas y al público en general para visibilizar esta lacra y concienciar de la importancia de que se tomen medidas que ayuden a erradicarla desde todos los ámbitos (como educativo, laboral y social). El evento consistió en un concierto acústico a cargo de la conquense Pilar Cuadrado, que interpretó temas relacionados con esta problemática, y un posterior coloquio sobre las medidas de conciliación y contra la violencia de género en las empresas.
La FeSP-UGT ha lanzado la campaña Contra la violencia machista, más que palabras, porque consideran que, como profesionales de los servicios públicos, tienen la responsabilidad de acompañar a las mujeres y responder ante esta lacra, según señalan en una nota de prensa.
Desde UGT recuerdan “la terrible realidad de la violencia machista”: en España, según los últimos datos, en 2018 el número de denuncias por violencia sobre las mujeres ejercida por la pareja o expareja fue de 166.961, un 0,4% más que en 2017. Por otra parte, según los anuarios del Ministerio de Interior ese año los delitos contra la libertad sexual ascendieron a 13.811 (un 18% más que en 2017) y se produjeron 1.702 violaciones (un 22,7% más que en 2017), es decir, casi cinco violaciones al día.
El sindicato denuncia que en los diez primeros meses de este año han sido asesinadas 50 mujeres por la violencia machista, tantas como en todo 2018, y han sido asesinados tres menores y 41 han quedado huérfanos.
Mayor coordinación
“Desde la Secretaría de Igualdad de la FeSP-UGT consideramos que el papel de las administraciones públicas es esencial para la prevención, detección y acompañamiento de las mujeres que han sido víctimas de violencia y sus hijos e hijas. Planteamos que la violencia machista no puede externalizarse a la gestión privada, que es necesaria una mayor coordinación entre las diferentes administraciones y que la formación de las empleadas y empleados públicos es esencial”, reivindican.
Desde la organización también alertan sobre las nuevas formas de ejercer la violencia contra las mujeres a través del uso de las nuevas tecnologías, como el ciberacoso, por lo que demandan una regulación específica sobre esta materia, considerando que son necesarias políticas eficaces y recursos económicos. “Internet, dispositivos móviles, redes sociales y servicios de mensajería instantánea o geolocalización han dado pie a nuevas formas de ejercer la violencia contra las mujeres, facilitando conductas de control, intimidación, amenazas, acoso y humillación”, lamentan.