La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha señalado hoy en Cuenca sobre la enmienda del Grupo Popular del Congreso de los Diputados al proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado en la que pide incrementar las derivaciones de agua del trasvase Tajo-Segura, que "es muy difícil explicar que donde no hay agua, se pretende que haya".
Ribera, que ha clausurado en la sede conquense de la Univesidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) una jornada de convivencia de estudiantes del Campus Rural, ha subrayado que el Gobierno de España está haciendo "una gestión extraordinariamente responsable de una situación crítica y que, problablemente, será cada vez más complicada con arreglo a los escenarios climáticos que se manejan".
Por ello, ha dicho que se está trabajando con los planes de gestión de cuenca para reforzar, sobre todo en las cuencas receptoras, las infraestructuras para las aportaciones de agua procedente de la desalación o de la reutilización.
Asegura la ministra que se ha mantenido un diálogo "fluido y constante" con todas las instituciones, así como con las comunidades de regantes y usuarios con el convencimiento de que "nunca jamás ha habido una disponibilidad de recursos tan importante ni un programa de inversión tan grande en materia de agua que permita además acceder a ese recurso hidráulico de proximidad a un precio asumible por los agricultores".
A juicio de Teresa Ribera, "es una solución que beneficia a todos", por lo que la presentación de enmiendas - en referencia a las del PP- "tienen más que ver con hacer ruido y enfrentar territorios que no con soluciones de raiz sobre un problema que debería ser una de las grandes prioridades de actuación para el conjunto de las instituciones de todo el territorio español".