La escalada de precios de la cesta de compra, que se venía produciendo en los últimos meses y que ha repuntado a raíz de la invasión rusa de Ucrania, está provocando en los últimos días un cambio importante en los hábitos de consumo y un incremento generalizado de las compras en los supermercados. Aumento de la demanda que está siendo especialmente desmesurada en ciertos productos, como es el caso del aceite de girasol y de semillas, que han llegado a agotarse en los supermercados y grandes superficies de la capital conquense.
Un comportamiento que recuerda a los inicios de la pandemia de la Covid-19 con el acopio generalizado de papel higiénico que provocó, incluso, el desabastecimiento de este producto en la gran mayoría de los establecimientos del país.
En esta ocasión, sin embargo, el temor a las posibles consecuencias de este conflicto bélico en los precios de muchos de los productos de la cesta de la compra y a un hipotético desabastecimiento del aceite de girasol al ser Ucrania uno de los principales proveedores de España está llevando a muchos consumidores a adquirir más cantidad y más productos de lo habitual.
Así lo constata Isabel Villaescusa, gerente del hipermercado Alcampo Cuenca, quien indica que desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania se ha podido apreciar “cierta psicosis generalizada de la población” ante el temor de una brusca subida de precios. De hecho, asegura que en esta gran superficie se ha producido un consumo exagerado de aceite de girasol, hasta el punto de que en la actualidad no hay existencias, ya que “los proveedores no nos están suministrando”, a lo que se ha sumado el aceite de semillas, del que “ya no hay unidades de algunas marcas”.
Pero esta anomalía en el consumo no se ha quedado ahí y la responsable de Alcampo Cuenca habla también de un mayor consumo de productos de celulosa, como servilletas, pañuelos o papel higiénico, así como de lácteos, legumbres y arroces.
En los últimos días se ha producido un incremento generalizado en el gasto medio por cliente con respecto a febrero, que ha rondado en torno al 6 por cientoLa subida generalizada de los precios es un hecho constatado, si bien Villaescusa aclara que no solo se ha debido a la escalada del petróleo y de las materias primas, sino también a la nueva Ley de la Cadena Alimentaria, que ha traído consigo una revisión general del precio de los alimentos para consumo humano al prohibir la venta a pérdidas.
La situación no varía mucho en el hipermercado Carrefour Cuenca. Su gerente, Francisco Cerpa, constata igualmente un crecimiento considerable del consumo, especialmente en la última semana, cuando, según estima, se ha producido en torno a un 6% de incremento en el gasto medio por cliente con respecto al mes de febrero.
Este establecimiento también se ha quedado sin existencias tanto de aceite de girasol como de semillas, a pesar de que aconsejaban no comprar más de 5 litros por cliente, al tiempo que ha experimentado una mayor demanda de aceite de oliva y latas de conservas.
Ambos directivos confían en que la situación se vaya normalizando paulatinamente y el consumo regrese a sus cauces habituales. Y, en este sentido, coinciden en lanzar un mensaje de tranquilidad a los consumidores e invitarles a no comprar de manera desmesurada, porque, de esta manera, no se producirán problemas de desabastecimiento, tal y como está ocurriendo estos días con el aceite de girasol.
