Durante la pasada legislatura, Izquierda Unida intentó, sin éxito, que el pleno del Ayuntamiento de Cuenca aprobara realizar una auditoría “ciudadana” de la deuda para conocer con exactitud los motivos que llevaron a las arcas municipales a una situación económicamente crítica, pues, sobre todo a partir de 2005, supuestamente sobre todo desde 2007, la deuda se disparó y en la actualidad ronda los 60 millones de euros. Pero, pese a contar con el respaldo de Ciudadanos, los concejales de IU se encontraron una y otra vez con la oposición de Partido Popular y PSOE, las dos formaciones que se alternaron en el gobierno durante los años de crecimiento de la deuda.
No ha hecho sino comenzar la nueva legislatura y la situación se repite, ahora con Cuenca en Marcha! como defensora de una auditoría y el respaldo de la concejal de Ciudadanos. Entre otras cosas, considera que esta auditoría permitiría depurar responsabilidades, si las hubiese. Pero su moción presentada este jueves en el pleno ordinario celebrado en el Ayuntamiento no ha salido adelante al encontrarse con la oposición tanto de PP como de PSOE, un previsible rechazo al que se han sumado los ediles de Cuenca nos Une.
En el PSOE, entienden que la intervención ya controla las cuentas del Consistorio, lo mismo que el Ministerio de Hacienda, al estar la administración sometida a un Plan de Ajuste.
Cuenca nos Une
Un argumento similar al sostenido por el portavoz de Cuenca nos Une, Dámaso Matarraz, que aunque no ha justificado que en un pasado se pudieran haber tomado decisiones equivocadas, ha matizado el “contexto”, diferente al actual, en que aquellas se tomaron, cuando Cuenca crecía en población (se hablaba de llegar a una ciudad que rondara los 200.000 habitantes), lo mismo que en construcción de viviendas. Hasta que llegaron el pinchazo de la burbuja inmobiliaria y la crisis económica y el Ayuntamiento empezó a tener problemas para pagar a los proveedores y a sus propios empleados.
