Semblanza de un geógrafo ejemplar
Hoy nos ha dejado, víctima del coronavirus, Miguel Ángel Troitiño Vinuesa, catedrático de Geografía Humana de la Universidad Complutense de Madrid. Nacido en El Arenal (Ávila) y formado en la UCM, donde se licenció y doctoró en Geografía con su investigación “Cuenca. Evolución y crisis de una vieja ciudad castellana”, obtuvo con el mismo tema el premio de Investigación González Palencia Ciudad de Cuenca de 1980 y el Nacional de Urbanismo del MOPU de 1981.
Es el autor del texto del expediente justificativo presentado en la UNESCO para la declaración de Cuenca Ciudad Patrimonio de la Humanidad (1996).Esta trayectoria tan centrada en estudios conquenses, ha sido reconocida por la RACAL con el nombramiento de académico correspondiente.
Cuesta trabajo escribir en tiempo pasado, cuando hasta hace dos minutos nos referíamos a él en presente, como siempre que escribimos Geografía sobre Cuenca, dado que por su ingente número de publicaciones dedicadas a la ciudad y a su territorio, la obra de Miguel Ángel es de obligada consulta y cita.
Casado con una conquense, María Isabel Torralba y muy vinculado a la ciudad, asistía con frecuencia a acontecimientos que se celebraban en ella, por temas sobre la evolución urbana, el turismo, el medio ambiente urbano, el futuro de la ciudad como destino turístico u otros. Organizó numerosos Cursos, Congresos, Jornadas y Seminarios dedicados a temática centrada en Cuenca.
El profesor Troitiño, siempre próximo y generoso, ha aceptado las invitaciones a pronunciar conferencias en cualquier ámbito cultural de la ciudad y en multitud de ocasiones ha participado de sus fiestas con sus gentes, como un conquense más.
Por todo esto y a pesar de la tristeza de este momento, nuevamente reivindicamos un reconocimiento municipal sustanciado en un espacio urbano de la “Ciudad Alta”, como él citaba al casco antiguo, dedicado a su memoria.
Desde estas líneas nos unimos al dolor de Maribel, su esposa, al de sus hijas, al de toda su familia y al de los muchos compañeros, alumnos y amigos que deja.
Hasta siempre, amigo Miguel Ángel.
