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Mangana

Se acerca el final definitivo del proyecto de la Plaza de Mangana

Desde el año 2006 el Consorcio ha invertido en este espacio más de 3 millones de euros
Fotos: Saúl García
10/10/2017 - Nuria Lozano

En el verano de 2018 el proyecto integral de rehabilitación de la Plaza de Mangana se dará por finalizado una vez que concluyan las tres actuaciones que están pendientes: la restauración de la Torre, el cerramiento del anillo de todas las calles aledañas y el más importante de todos, la apertura del museo que está debajo de la Plaza.

Unas actuaciones que acometerá el Consorcio Ciudad de Cuenca, organismo que desde su creación en 2006 lleva interviniendo en Mangana. Once años en los que se han invertido más de 3 millones de euros en diferentes obras y en las ocho campañas de excavaciones que se han realizado.

Su gerente, Daniel de León, ha reconocido que tiene ganas por ver terminado por fin este proyecto “delicado y complejo” que ha sido el resultado de la suma de muchas actuaciones, algunas de ellas controvertidas. “Tenemos mucha ilusión y ganas de decir: ahí está Mangana para disfrutarla”. En su opinión, esta emblemática plaza se convertirá a partir del año que viene en el espacio fundamental de la Cuenca histórica ya que bajo sus pies guarda restos manifiestos de la presencia de las tres culturas en la capital: el barrio y la sinagoga judíos, el Alcázar musulmán, y la ciudad cristiana, que se levanta a partir de 1391 con la expulsión de los judíos, y que tiene en la iglesia de Santa María de Gracia su principal exponente.

EL MUSEO

Precisamente estos restos, junto a huellas de edificios del siglo XVIII que fueron derribados para construir un aparcamiento que nunca llegó, nutrirán al futuro centro museístico.

De León ha explicado que la adecuación de los espacios expositivos en las calles de Santa María y Alcázar se encuentra en fase de proyecto. Falta por definir un recorrido accesible para todos los públicos que llevará barandillas y protecciones; y adecuar el proyecto museográfico al físico, reforzando muros y restaurándolos.

Asimismo, se habilitará una sala donde se proyectará un vídeo explicando lo que se ha hecho en estos años, que se completará con paneles por todo el itinerario.

El presupuesto estimado es de unos 150.000 euros, aunque puede variar una vez se redacte el proyecto definitivo. “Este mes de octubre conoceremos el alcance de estas actuaciones”, ha dicho el gerente del Consorcio. Las obras empezarán a finales de 2017 o principios de 2018.

“Este Museo será la última pieza del puzzle y lo que dará sentido a todo lo que se ha hecho en Mangana hasta ahora”, ya que se convertirá en una especie de centro de interpretación donde el visitante podrá conocer al detalle todas y cada una de las actuaciones que se han ido realizando año tras año y el por qué de las mismas.

La emblemática plaza se convertirá en el espacio fundamental de la Cuenca histórica con restos manifiestos de las tres culturas, muchos de los cuales podrán verse en el museo

LA TORRE Y EL CERRAMIENTO

Por otra parte, están en fase de redacción los proyectos de restauración de la Torre de Mangana. El objetivo es solucionar unos problemas estructurales y hacerla visitable.

Para ello se arreglará el cuerpo de campanas que presenta muchas grietas. El presupuesto rondará los 70.000 euros.

La Torre podrá ser visitada aunque con restricciones, ya que tiene un paso muy estrecho y una escalera muy empinada, y requerirá el uso de casco a los visitantes.

El tercero de los proyectos, pendiente solo de autorización municipal y que por tanto se ejecutará primero, será la rehabilitación de los restos arqueológicos intramuros de la muralla del Alcázar.

Consistirá en cerrar el anillo de las calles de Mangana y urbanizar el trozo que queda en la zona de los ascensores del parking, aún con gravilla, así como la restauración de las ruinas que hay detrás de la muralla. En este caso, se invertirán 300.000 euros.

Antes de acometer estas obras se colocarán de forma inminente unos carteles informativos por toda la Plaza que se acabaron antes del verano.

En la Semana Santa de 2016, Cuenca recuperaba un espacio público que llevaba cerrado más de 15 años. La Plaza de Mangana se abría a conquenses y visitantes, pero quedaban algunos flecos. El verano que viene este emplazamiento de las tres culturas quedará completo y listo para seguir escribiendo la historia.