Numerosos conquenses y fieles a la Hermandad de San Isidro aprovecharon la tarde de ayer para asistir a la festividad de su Santo en la ermita que lleva su nombre, acompañados con los tradicionales roscos de anís, vino y cestas de fruta.
La misa comenzó a las 19:30 horas, oficiada por el párroco de Santiago y San Pedro, Rector de la Ermita de San Isidro, don Cruz Campos Mariscal. Posteriormente inició la Procesión de las Rogativas con las imágenes de San Isidro Labrador y de su esposa, Santa María de la Cabeza, a hombros de sus fieles.
El cortejo procesional, seguido por la Banda Municipal de Música de Cuenca, recorrió el camino desde la Ermita hasta el barrio del Castillo, bordeando la Hoz del Júcar para luego regresar por la calle Larga, la calle Corta, Licenciado Torralba y el camino de San Isidro.
Los conquenses que se encontraban venerando al patrón de los agricultores señalaban que se trata de una fiesta muy familiar en la que siempre es un orgullo ver a los más pequeños vestidos con el traje tradicional acompañando a San Isidro Labrador.