Catedral de Cuenca
Los resultados de la restauración del retablo de la Asunción, mejores de lo esperado
De intenso y muy complejo define la restauradora Mar Brox el trabajo desarrollado en los últimos seis meses con el retablo de la Asunción de la Virgen, desde que el pasado mes de noviembre llegara a su taller desde la capilla del Deán Barreda de la Catedral de Cuenca. Pero, eso sí, lo tiene claro y no duda en afirmar que ha merecido la pena, sobre todo, al comprobar que “los resultados han sido aún mejores que los esperados en un principio”.
Reconoce que las expectativas iniciales eran muy altas al estar hablando de la recuperación de una de las joyas más destacadas del renacimiento conquense, un retablo del siglo XVI con pinturas en tabla de Martín Gómez el Viejo, y, aun así, “el resultado final nos ha sorprendido muy gratamente”, en especial, por los colores originales que ahora han salido a la luz, al igual que los muchos detalles pictóricos del autor, ocultos bajo capas de repintes, polvo y barnices oxidados.
Un trabajo sobre las tablas de Martín Gómez el Viejo que ha llevado consigo una ardua y laboriosa restauración, por parte de Mar Brox bajo la dirección del experto y profesor de Restauración Luis Priego, debido, sobre todo, al hecho de haberse encontrado con barnices modernos que ha costado mucho retirar, a lo que se han unido muchos repintes, más de los esperados. Pese a ello, su retirada ha servido para comprobar que no hay tantas pérdidas de pintura original como se creía, lo que, para Brox, ha sido, sin duda, una buena noticia, que permitirá contar con una obra pictórica de este calibre muy bien conservada.
mazonería
Pero si lenta y laboriosa ha sido la recuperación de las catorce pinturas de este retablo no lo ha sido menos la restauración de la estructura o mazonería. No en vano, los trabajos acometidos en ella han supuesto más de la mitad del tiempo empleado en esta restauración.
Y es que, además del sellado de grietas, se ha acometido la reintegración de las pérdidas de volumen reconstruyendo prácticamente todas las molduras decorativas perdidas. A ello se han sumado los trabajos para subsanar los problemas que presentaba la estructura de retablo como resultado de que en algún momento de sus cuatro siglos de historia se desmontara y en el posterior montaje no se hiciera en condiciones. Al final, según detalla Brox, ha podido encajar cada pieza en su sitio, a pesar de que las maderas se encontraban bastante alteradas con respecto a su forma original.
Se ha completado la intervención con la limpieza de la trasera del retablo, que ha sido más importante de lo que se creía, puesto que se ha encontrado con bastante humedad retenida en el polvo, a lo que se ha unido el ataque de xilófagos. Todo ello ha requerido un tratamiento de la madera en profundidad y en condiciones con el fin de garantizar un buen resultado final.
Actuales trabajos
En la actualidad, Brox se está dedicando a la reposición de oro nuevo en las pérdidas de la mazonería, para a continuación acometer la aplicación de barnices con el objeto de igualar la apariencia del oro respuesto con la del original.
Un barnizado final de protección completará esta intervención que, según Brox, concluirá en el plazo de quince o veinte días, lo que permitirá inmediatamente después proceder al traslado y montaje del retablo de la Asunción de la Virgen en la capilla del Deán Barreda de la Catedral, que, por cierto, está siendo remozada en la actualidad.
El objetivo marcado es que a finales de mayo ya sea una realidad y pueda ser disfrutado por todos.