Si hace poco más de dos años –en pleno confinamiento– un gran socavón aparecía en el patio del Colegio Público ‘Fray Luis de León’, de la capital conquense, debido al colapso del colector de Astrana Marín, en los últimos meses se ha repetido la escena en, al menos, otros dos puntos de la ciudad, uno en el Paseo del Ferrocarril y otro en la rotonda del Centro de Recepción de Turistas; eso sí, en este último está pendiente de determinarse si está relacionado con la red de saneamiento o no, aunque todo apunta a que sea lo más probable.
Incidencias que, sin lugar a dudas, traen de cabeza al Ayuntamiento de Cuenca, que ve cómo la falta de mantenimiento e inversiones en la red de saneamiento durante muchos años está pasando ahora factura y así lo han venido manifestando en este tiempo desde el equipo de Gobierno municipal.
Y no es para menos, si se tiene en cuenta que solo estas tres actuaciones conllevan inicialmente una inversión total cercana a los 2,3 millones de euros, sobre todo por la envergadura de la reparación del colector de Astrana Marín, que se estima que supondrá en torno a 1,7 millones de euros, a los que se suman los cerca de 100.000 de la demolición del pabellón polideportivo Luis Yufera, adjudicada el pasado 10 de junio a la empresa Demolición y Descontaminación, S.L.
No hay que olvidar que este derribo es imprescindible para acometer el arreglo del colector de Astrana Marín; por cierto, el más importante de la ciudad al evacuar la tercera parte de la totalidad de las aguas fecales y pluviales y cuya reparación lleva implícita una gran complejidad técnica, puesto que la red se encuentra a unos18 metros de profundidad; es decir, aproximadamente la altura del cercano edificio de Cáritas Diocesana.
La adjudicación de la redacción y ejecución del proyecto en cuestión está a falta de que la Junta de Gobierno Local dé el visto bueno a la empresa propuesta por la mesa de contratación, tras el correspondiente dictamen de un comité de expertos, que no es otra que Viales y Obras, S.A. De ahí que lo más probable es que se vaya a adjudicar en breve.
Entre tanto, a lo largo de la pasada semana se han estado realizando sondeos en el interior del patio del Fray Luis de León, en las proximidades del socavón, con el fin de analizar el subsuelo y determinar la profundidad a la que se encuentra la tierra firme para acometer las obras de reparación de la red. Y, de hecho, se han llegado a realizar prospecciones de hasta 25 metros de profundidad.
LOS OTROS DOS PUNTOS
El colapso de la red de saneamiento y pluviales del Paseo del Ferrocarril, que originaba hace unas semanas un socavón de unos 8 metros de profundidad, ya está siendo reparado. El lunes, 20 de junio, comenzaban las obras, que se adjudicaban a la empresa Jomarján por un importe de 172.000 euros y un periodo de ejecución de un mes y medio.
En otra situación bien distinta se encuentra la intervención en la rotonda de Cáritas a raíz de la aparición de unas importantes deformaciones de la calzada y de la isleta ajardinada, que quizá tengan que ver con la red de saneamiento, aunque eso lo tendrá que determinar los sondeos que se han realizado la pasada semana y que, al cierre de esta edición, no habían sido concluyentes, según daban cuenta fuentes municipales.
Lo que sí está claro es que la actuación ya está adjudicada a la empresa Viales y Obras Públicas, S.A. por un importe de 302.000 euros y un periodo mínimo de ejecución de dos meses.
PLAN DE MANTENIMIENTO
De manera paralela y desde hace un par de años, el Ayuntamiento está acometiendo una serie de trabajos de limpieza y conservación preventiva de la red de saneamiento; algo que se está haciendo por barrios, de manera integral.
Hasta el momento, ya se ha actuado en más de 12 kilómetros de la red de saneamiento de la ciudad y se han limpiado los sistemas de depuración primaria (fosas de decantación) de las pedanías. El objetivo final de esta intervención, que supone un coste aproximado de unos 130.000 euros al año, pasa por dejar limpia toda la red de la capital y de sus pedanías en tres años.
Los trabajos están consistiendo en la extracción de arrastres, arenas y materiales sólidos que colmatan las tuberías y en la inspección con cámaras de televisión de las canalizaciones, tanto de aguas fecales como de pluviales, con el fin de tener un diagnóstico a futuro de zonas críticas con deficiencias que puedan desembocar en averías imperantes.
La intención del Consistorio para este ejercicio es continuar con la limpieza de barrios, como Villarromán, Casco Antiguo y Santa Teresa, y de ramales importantes, como son los emisores de la zona del río Júcar, que llegan a la depuradora.
