En un acto comedido en la Sala 2 del Auditorio de Cuenca, el Ayuntamiento de Cuenca hizo entrega de los reconocimientos por el Día Internacional de la Mujer a propuesta del Consejo de Igualdad a las galardonadas: Delia Millán, Asun Flores, Luz María Cañas y el equipo femenino del Club Rugby A Palos.
Una ceremonia sin más público del estrictamente necesario: premiadas, algún familiar, autoridades y prensa que inmortalizaron una entrega de premios muy emotiva. Y es que pese a la gran barrera que supone usar en todo momento las mascarillas, las palabras, las anécdotas y las emociones despertadas por este reconocimiento en valía de la figura de la Mujer dieron sentida fuerza al mensaje de seguir trabajando para la igualdad.
Este fue el eje de las breves intervenciones de las premiadas. Comenzó el equipo femenino del Club Rugby A Palos, como grupo que se abre paso en la igualdad a través del deporte con la fuerza de una melé. Xiomara González y Eva Sevilla pusieron voz a las compañeras que vistieron por completo de negro con la excepción de una flor morada que lucieron en recuerdo y homenaje de la "eterna jabata", Cristina Martínez. Un premio, el recibido por parte del consistorio, que las "jabatas" quisieron ofrecer tanto a las nuevas generaciones de mujeres, "como nuestras predecesoras".
Acto seguido, Sara Batres, periodista de Radio Nacional que obró de maestra de ceremonias, presentó a Delia Millán, la creadora e impulsor del laboratorio de innovación tecnológica FabLab Cuenca, reconocida por programas surgidos de este proyecto como "Mujeres Makers" (iniciativa que trata de acercar el mundo de la tecnología y la innovación a niñas y mujeres), así como por su labor como coordinadora en el proyecto "Coronavirus Makers", que "tejió" una red de usuarios con acceso a impresoras 3D para elaborar elementos de protección para la primera línea de contención contra el virus.
Millán admitió su sorpresa por el reconocimiento y agradeció de igual manera el apoyo y trabajo tanto de su equipo como de su familia, el concejal Miguel Ángel Valero para lograr esa red de asistencia en la pandemia además de las muchas personas que trabajaron de forma altruista para terminar con un mensaje en claro que defiende en cada uno de sus iniciativas: "La igualdad es una forma de ser".
Unas palabras similares que dejó sentir Asun Flores, la maestra que agradeció su premio por el Día de la Mujer a su familia, docentes y alumnos, con un mensaje cargado de "responsabilidad" a modo de cuento, en el que Flores llamaba a la acción de los formadores para "educar en igualdad, está en nosotros".
Y en último lugar, el cuarto premio de este Día de la Mujer lo recogió Luz María Cañas. La ilustre conquense no pudo contener su emoción al recordar la anécdota en plena pandemia al hablar con una de sus amigas que doblaba turnos en el Virgen de la Luz: "Me envió un mensaje envuelta en bolsas de basura y esparadrapo y me rompió el alma. Yo una de las pocas que sé hacer bien es coser así que llamé a Darío y le dije si podía conseguirme tela". De esta forma, 200 mujeres y 2 hombres trabajaron para realizar batas para los sanitarios. Unas cifras demoledoras que Luz María quiso darle la vuelta: "¿Qué hubiera pasado si hubiera sido al revés? Hablamos de la educación que le damos a nuestros jóvenes, y depende de quién se la da".
El acto concluyó con la intervención del alcalde, Darío Dolz, que felicitó a las premiadas, así como a "esas mujeres que se quedaron en casa este 8 de marzo debido a la complicada situación actual", que obligó a celebrar esta entrega de premios de forma comedida. Así, el regidor señaló que es necesario "seguir reivindicando la igualdad" debido a las numerosas desigualdades que siguen sufriendo las mujeres en nuestra sociedad.
De esta forma se hizo mención a cuatro ámbitos muy distintos del mundo de la mujer, pero en los que, de una manera u otra, persiguen el mismo fin de una u otra manera.