Prisión comunicada y sin fianza para Sergio Morate en Estremera

A las 14.00 horas y con más de un centenar de personas esperándolo a la salida de los Juzgados de Cuenca, entre los que se encontraban familiares de Laura del Hoyo y Marina Okarynska, Sergio Morate, principal sospechoso del asesinato de las dos jóvenes conquenses, salía escoltado en dirección al Centro Penitenciario Madrid VII de Estremera. Indignación y gritos de "asesino", así como quejas contra el Juez reclamándole que le dejara en la prisión de Cuenca, le despedían mientras se marchaba escoltado por un convoy de la Unidad de Intervención Policial de la Policia Nacional. Todo después de una mañana de tensa espera en la que Morate se acogía a su derecho a no declarar ante Gonzalo Criado del Rey Tremps, Juez del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número uno de Cuenca, quien decretaba para él prisión provisional y sin fianza al imputarle los delitos de asesinato de Laura y Marina. El presunto culpable del doble asesinato ingresará de forma inmediata en la prisión de Estremera, mientras la causa sigue abierta bajo secreto de sumario y continúa su proceso en sede judicial.

Hay que recordar que Sergio Morate Garcés llegaba a Cuenca este sábado cuando el reloj marcaba las 3.20 horas de la madrugada, el convoy formado por varios furgones, custodiando a tres coches, en el medio de los cuales viajaba él, llegaba a los juzgados de la ciudad donde, pese a la lluvia, una decena de personas le esperaban y lanzaban gritos de "asesino". Antes, por la tarde había sido entregado a miembros de la Policía Nacional Española por parte de las autoridades rumanas en Timisoara en un sencillo acto, donde se daba cumplimiento a la sentencia dictada por la Corte de Apelación de esta ciudad rumana y que el pasado lunes era ratificada por la Alta Corte de Casación y Justicia de Bucarest tras presentar el acusado un recurso en el que pedía no ser extraditado a España temiendo un juicio injusto. Ahora será la justicia española la que le juzgue.

Morate, que viajó en avión privado junto a otros presos extraditados, aterrizaba en el aeropuerto de Torrejón de Ardoz ya entrada la noche para después ser trasladado a Cuenca. Las autoridades policiales españolas también tienen en su poder ya sus efectos personales y el coche con el que escapó y que debe ser clave en la investigación para esclarecer los hechos del terrible doble asesinato.