El presidente de la Diputación, Benjamín Prieto, considera que el ascensor de acceso al Casco Antiguo que propone el Gobierno regional y que comunicaría la zona del Teatro-Auditorio de Cuenca con la plaza de Ronda “puede ser una infraestructura interesante para una zona de la ciudad, para un público que viene y que está”, de ahí que muestre cierta disposición a colaborar económicamente con el proyecto (“no renunciamos a tener que colaborar”, han sido exactamente sus palabras) aunque una vez que este “esté consumado y se le vea la viabilidad”.
El instrumento que Prieto en cambio ahora mismo descarta que pueda financiar el 20 por ciento del proyecto teniendo en cuenta el compromiso del Gobierno regional de aportar el 80 por ciento es el Consorcio Ciudad de Cuenca, del que forman parte las cuatro administraciones (Gobierno central, autonómico, Ayuntamiento de la capital y Diputación) pero el cual a su entender “se focaliza como campo de batalla” para el ascensor cuando ya cuenta con varios planes plurianuales de inversiones comprometidos “y otros proyectos que agotan su crédito”, entre los que cita la ampliación del Museo Arqueológico. “Si queremos seguir con él museo no se pueden asumir otros proyectos".
Eso sí, señala que el ascensor “no es la solución total para la accesibilidad” al Casco, y apunta que “ojalá se le sumaran otras porque el Casco Histórico es un privilegio tenerlo”. Y acusa al Gobierno regional de “sacar siempre en el Consorcio el monotema”.
En este sentido, hay que recordar que el alcalde de la capital, Ángel Mariscal, y el concejal de Urbanismo, Julián Huete, han señalado en varias ocasiones que los ascensores no son “la panacea” que vaya a resolver el problema de accesibilidad al Casco, y considerado que deben planearse otra serie de actuaciones, como por ejemplo autobuses eléctricos.
Además, Prieto ha hecho hincapié en que “son más de 70 años, casi un siglo”, los que en Cuenca se lleva “hablando de unos ascensores que faciliten la accesibilidad al Casco”.
