Cuenca es la ciudad del Somos. Así lo ha dejado patente este lunes en el transcurso de Culinaria el concejal de Turismo y Patrimonio Histórico, Miguel Ángel Valero, quien ha presentado dentro del programa de la feria Culinaria la candidatura de Cuenca a capital española de la Gastronomía.
Un reconocimiento que se fallará el próximo 16 de noviembre y que Cuenca disputa con otras dos ciudades españolas de Oviedo y Pontevedra. Pero en Cuenca, a juicio del edil, está todo preparado para erigirse con la capitalidad.
Y es que esto es algo que hace “muchísima ilusión al Ayuntamiento de la capital”, quien ha puesto de manifiesto algunos valores de la ciudad que la hacen única y diferente frente al resto de ciudades del país.
“Cuenca es una ciudad fortificada, una ciudad abarrotada de patrimonio donde las calles rezuman cultura, donde se hizo inexpugnable en un momento que luego dieron paso a casas colgadas al cielo y, al mismo tiempo, una ciudad llena de puertas y que queremos que sea abrazo para toda España con esta capitalidad gastronómica”, ha recitado.
Todo ello porque “somos una ciudad con puertas abiertas, somos una ciudad de pasión, de compromiso, somos una ciudad que cree que los valores históricos y patrimoniales son el punto neurálgico, somos una ciudad de música”.
Pero también sacaba a relucir Valero los valores artísticos, porque en Cuenca “somos una ciudad de contrastes, somos una ciudad de vanguardia, que el arte lo lleva a la calle”, poniendo como ejemplo los paseos del arte o las diferentes acciones artísticas que se llevan a cabo en la ciudad
HACER “ALGO MARAVILLOSO” CON MATERIAS PRIMAS A PRIORI PAUPERRIMAS
Aunque Cuenca fue una ciudad que intentó estar cerrada, “somos una ciudad que ha tendido puentes para unirnos al resto de España”. También “somos una provincia riquísima en materias primas, que abraza a La Sierra con productos muy demandados como las setas o la caza”.
En La Mancha y La Manchuela está presente esa materia prima histórica con las viñas “que hacen unos caldos reconocidos en todo el mundo o el ajo morado de las Pedroñeras”.
La Alcarria es un lugar “que denominan la toscana conquense por su belleza, sus elementos patrimoniales y ese aceite maravilloso”. Con todas esas materias primas “somos una ciudad que abraza, teníamos el valor patrimonial, cultural y nos faltaba el valor de la gastronomía”.
Una gastronomía que, “sin duda”, “ha despertado gracias a la materia gris de nuestros cocineros, que con su talento han hecho grande a la ciudad de Cuenca y a su gastronomía”.
Y con ese talento, el Ayuntamiento ha decidido presentarse a la Capitalidad Gastronómica para el próximo 2023, porque, aunque esas materias primas “pudieran ser paupérrimas, se han transformado con la magia que ellos tienen en platos excepcionales con una maravilla de presentación y un sabor que deja sin palabras”.
Por todo ello, Valero espera que esta tercera vez que Cuenca se presenta a la capitalidad sea la vencida, pero, aunque no lo sea, desde luego que Cuenca “ya ha ganado”.
Todo ello porque en el dossier, de más de 150 páginas, “hemos demostrado que el movimiento se demuestra andando, donde a lo largo del mes de septiembre ha habido una batería de actividades que han puesto la gastronomía de Cuenca en lo más alto”.