El pleno del Ayuntamiento de Cuenca ha aprobado, con los votos favorables de PP, PSOE y Cs y la oposición de IU, incluir en los presupuestos de 2018 y 2019 el crédito necesario (en torno a 1,7 millones de euros) para adjudicar las obras del parking de Astrana Marín, paralizadas desde hace ocho años, así como su posterior gestión, favoreciendo la viabilidad de esta infraestructura.
Al cambio de voto de PSOE y Cs ha contribuido el hecho de que, con respecto al pasado 11 de diciembre, cuando la propuesta del equipo municipal fue rechazada, se haya incrementado considerablemente la demanda de plazas en el parking, que ha pasado de menos de media docena de personas a un total de 67, lo que garantiza que el Ayuntamiento recuperará la mayor parte del crédito aprobado, que en su mayoría va destinado a adquirir inicialmente 65 plazas que ya tienen comprador. Sí tendría que asumir el coste de 15 plazas para destinárselas al Instituto Alfonso VIII, según un convenio acordado con el Gobierno regional, así como las obras de urbanización de la zona.
La propuesta incluye además una nueva modificación, que es dar prioridad, tras los vecinos, al Gobierno regional para que este pueda adquirir plazas en propiedad en esta infraestructura que llegará a sumar un total de 294 con vistas al hotel con centro de convenciones que un grupo empresarial estaría interesado en construir y poner en marcha en las inmediaciones del futuro parking.
“Es una noticia de legislatura”, ha destacado el alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal, tras esta aprobación, mientras que el portavoz municipal, José Ángel Gómez Buendía, ha considerado que “nos tenemos felicitar todos” de que la propuesta salga adelante, aunque matizando que “ha sido el equipo de gobierno el que después de ocho años ha traído una solución”.
Por parte del PSOE, su portavoz, María Jesús Gómez del Moral Martínez, ha destacado que con respecto a la propuesta de diciembre hay un gran avance, consistente en que “el aparcamiento no va a costar dinero a los conquenses”.
Consulta popular
Antes, fue rechazada por PP, PSOE y Cs una propuesta de IU para realizar una consulta popular con el fin de que los ciudadanos pudieran decidir qué hacer con el parking paralizado. El concejal de IU Pablo García reprochó al resto de grupos “no atreverse a fomentar la participación democrática”, ante lo que le respondieron que los ciudadanos ya deciden con su voto cada cuatro años en las elecciones municipales depositando en los concejales elegidos la responsabilidad de tomar decisiones.