Ya ha regresado a su lugar habitual, la Catedral de Cuenca. Después de haber pasado la noche del 20 al 21 de septiembre en la Casa Consistorial de la capital, el Pendón del rey Alfonso VIII, símbolo de la toma de la ciudad en el año 1177 por las tropas cristianas, ha retornado a la seo conquense este miércoles, cuando se celebra la festividad de San Mateo. Como manda la tradición, ha sido la concejala más joven de la Corporación municipal, en este caso, Nerea Sancho Beamud, de Cuenca nos Une, quien lo ha devuelto al templo, tal y como prometió este martes, víspera del día grande de las fiestas, cuando lo trasladó hasta el Ayuntamiento.
Amenizado por la Banda Municipal de Música de Cuenca, en la devolución de la reliquia han participado los miembros de la Corporación Municipal, encabezada por el acalde de la capital conquense, Darío Dolz; una representación de las peñas mateas; el cronista oficial de la ciudad, Miguel Romero; maromeros y el grupo de recreación histórica ‘Conca’.
Tras devolver el Pendón, ha tenido lugar en la Catedral la misa en honor a San Mateo, a la que han precedido unas palabras de introducción por parte del cronista oficial de la ciudad. Posteriormente, la comitiva se ha dirigido a la estatua ecuestre de Alfonso VIII, situada en la plaza Obispo Valero, realizando el alcalde y el presidente de la Asociación de Peñas Mateas, Javier Benayas, la tradicional ofrenda floral.
Tampoco han querido perderse el día grande de las fiestas de San Mateo diversas personalidades como el presidente de las Cortes regionales, Pablo Bellido; el secretario primero de la Mesa del parlamento autonómico, el conquense Ángel Tomás Godoy; y el presidente del PP de Castilla-La Mancha, Francisco Núñez.
Después de la devolución de la reliquia y la ofrenda floral llegaba la penúltima suelta de vaquillas enmaromadas de estos festejos. Este miércoles habrá sesión doble del encierro por Plaza Mayor y aledaños, matutina y vespertina, con motivo de la festividad de San Mateo.