Después de la ausencia por la pandemia, el Parador de Cuenca ha recuperado su ya tradicional encendido de la Navidad, un acto solidario en favor de Aldeas Infantiles en el que se ha dado cita numeroso público y en el que los más pequeños han tenido un especial protagonismo
La magia de la Navidad ha inundado el exterior del Parador de Turismo de Cuenca en un acto al que no ha faltado Papá Noel, los villancicos y un reconfortante chocolate caliente con churros y magdalenas.
El acto, que ha contado con la colaboración de CEOE CEPYME Cuenca, Viveros La Mezquita, la Red Creativa, Donde Nacen los Sabores y el Coro de Cámara Alonso Lobo, arrancaba con una sabrosa merienda y la entrega de cartas a Papá Noel.
Este año el encuentro de los niños con el mágico personaje ha sido diferente, pues debido a la pandemia se han guardando las distancias que marcan las medidas de seguridad para evitar los contagios. Un hecho que no ha restado ilusión entre los pequeños que se han acercado al Parador a depositar sus cartas en el buzón de Papá Noel instalado para la ocasión.
El Coro de Cámara Alonso Lobo ha sido el encargado de poner música a la Navidad con un repertorio de Villancicos que han dado paso al encendido de las luces navideñas que adornan la fachada y exteriores del Parador de Turismo de Cuenca.
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