Cuando todavía no han terminado las obras del tercer plan de asfaltado de la legislatura, el Ayuntamiento ultima ya un cuarto plan de similares características a través del que actuará en nuevas calles, principalmente de la zona centro, como Fray Luis de León, Colón, Sánchez Vera, Diego Jiménez, Cervantes, Aguirre, Las Torres o Mariano Catalina.
Es uno de los anuncios que el concejal de Servicios a la Ciudadanía, Pedro J. García Hidalgo, realizó el martes en su comparecencia, a petición propia, en el pleno ordinario celebrado en el Ayuntamiento.
A este nuevo plan se añadirán, según informó, otras mejoras como la renovación de la señalización horizontal y vertical en Hermanos Becerril o la Avenida Juan Carlos I, la mejora del pavimento y la renovación de la señalización de la Avenida San Ignacio de Loyola y de la calle Santa Teresa, de esta última con el fin de reducir la circulación de vehículos por Los Tiradores, la reforma del muy deteriorado depósito de agua de Cerro de Molina, en este caso por razones de “seguridad y para garantizar el abastecimiento de la ciudad”, o el refuerzo del firme de la pista infantil de tráfico del parque de Santa Ana.
Se trata de unos trabajos que sumarán a acciones ya realizadas a lo largo de esta legislatura como la retirada de las tablas y el adecentamiento de Carretería, la peatonalización de la segunda parte de la calle Lorca, hasta camino Cañete, o la reparación de un buen número de bancos y de baldosas rotas en alrededor de medio centenar de calles de la ciudad, entre las que citó algunas como Carretería, José Cobo, Aguirre, Parque de San Julián, República Argentina o Paseo de San Antonio.
CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
En la oposición fueron sin embargo muchas las críticas lanzadas a García Hidalgo por su gestión.
“Cuenca está abandonada y sucia”, arrancó la portavoz de Cs, María Jesús Amores, para quien “puede ser verdad” que se hayan cambiado, como dijo García Hidalgo, baldosas en cincuenta calles, pero a su entender “habrán sido tres baldosas por calle, unas 150 en toda la ciudad: un número bastante insuficiente”. En este sentido, insistió en que la reparación de baldosas es “una reivindicación constante de todos los barrios de la ciudad: no hay ninguno que no tenga una acera absolutamente intransitable, por no hablar de escaleras como las de La Paz, a las que ni siquiera se puede llamar escaleras”.
“El estado de la ciudad es patético: olores, animales, suciedad por todos lados. Podemos presumir de un buen servicio, pero falta una gestión política que lo lidere”, señaló Ana Cruz, de IU, mientras que el socialista Víctor Alijas incidió en la “poca efectividad” de los cambios de baldosas o la necesidad de pedanías como La Melgosa de que se refuerce su limpieza y se reasfalte su pavimento.
