La nueva Comisaría de la Policía Nacional de Cuenca, que se está construyendo en la Ronda de San José de la capital conquense y que supone una inversión de 8,5 millones de euros –IVA incluido–, podría estar operativa a finales del año próximo.
Así lo ha asegurado este lunes en Cuenca el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, en una visita a las obras de la nueva Comisaría, que se está acometiendo en dos edificios a medio construir que fueron proyectados en su día como sedes sindicales y cuyos trabajos quedaron paralizados hace más de una década.
Grande-Marlaska ha estado acompañado en el acto por el director general de la Policía Nacional, Francisco Pardo; por el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca; por el alcalde de Cuenca, Darío Dolz; y por la presidenta de la Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios y de la Seguridad del Estado (SIEPSE, responsable de la ejecución del proyecto), Mercedes Gallizo, entre otras autoridades.
El responsable de Interior ha definido el nuevo inmueble como un “edificio moderno” y acorde a las necesidades de seguridad de nuestros tiempos, poniendo en valor que estas instalaciones supondrán una mejora tanto para el propio Cuerpo como para la ciudadanía y posibilitarán una relación más estrecha entre los policías y la sociedad. “Las comisarías son el eslabón de la Policía Nacional más cercano a los ciudadanos”, ha destacado el ministro.
La sostenibilidad medioambiental, social y económica será una de las señas distintivas de este inmueble. En el plano del desarrollo sostenible, el proyecto del edificio, con un consumo de energía casi nulo, ha obtenido la calificación Verde ‘4 hojas’ a través de la institución Green Building Council España (GBCe).
Unas instalaciones que darán servicio tanto a la ciudadanía como a los 147 policías que prestan servicio en la ciudad de Cuenca, a los que se ha referido como el “alma” de la nueva comisaría y que son 33 efectivos de los que había en julio de 2018. Para el ministro, esto ha redundado en la seguridad de Cuenca, que registra 31,5 infracciones por cada 1.000 habitantes, lo que supone 1,4 puntos menos que la media regional y diez puntos por debajo del promedio nacional.
Por ello, ha puesto a Cuenca “como ejemplo de seguridad” en el conjunto del país aunque ha pedido no caer en la “autocomplacencia” recalcando que el reto es seguir trabajando para reducir aún más estas cifras, haciendo especial hincapié en la lucha contra la violencia de género.
Las obras de la comisaría, que se enmarca dentro del Plan de Infraestructuras de Seguridad del Estado (2019-2025) dotado con 600 millones de euros, comenzaron hace un mes y está previsto que finalicen el próximo septiembre. Los dos volúmenes casi idénticos cuentan con tres alturas, sumando el proyecto un total de superficie construida de 6.739 metros cuadrados, según ha detallado Gallizo, quien también ha remarcado que este proyecto permitirá cerrar la “brecha” que suponían para la ciudad estos edificios inacabados.
En la misma línea, el alcalde de la ciudad también ha puesto en valor que este proyecto posibilitará solucionar un “problema urbanístico” y que la alineación de las distintas administraciones va a hacer realidad este proyecto frente a las “muchas palabras del PP y pocos hechos”.