
Fue hace un año y medio cuando Rocío Bustamante Bermúdez dio el paso definitivo para poner en pie ‘Orobroy Romi’ –‘pensamiento de mujer’ en caló-, una asociación decidida a dar visibilidad a la mujer gitana y a luchar por una igualdad de condiciones y oportunidades en todos los ámbitos de nuestra sociedad.
“La mujer gitana sufre una triple discriminación: por ser mujer, por ser gitana y por pertenecer a un grupo de exclusión social. Las barreras que se puede encontrar una mujer gitana no son las mismas que las que se puede encontrar otra persona y eso nos dificulta mucho el camino”, nos cuenta la fundadora y presidenta de ‘Orobroy Romi’ que cuenta en la actualidad con 140 socias.
“Orgullosa y contenta” de haber dado aquel paso, Rocío Bustamante subraya que era muy necesario el empoderamiento de la mujer gitana. “La asociación es fruto del deseo de tantas mujeres gitanas que necesitaban un cambio real y efectivo, un cambio que solo era posible mediante la lucha, la unión y el esfuerzo de todas”.
En opinión de Rocío Bustamante el concepto que a veces se tiene de la mujer gitana es erróneo, pero por fortuna la sociedad se ha ido dando cuenta de que “la mujer gitana no es invisible”, sino que tiene voz y personalidad propia. “La mujer gitana es luchadora, valiente, emprendedora, con muchos sueños y está deseando poder proyectarse y realizarse como mujer y como persona, pero para eso también necesitamos ayuda. Si no unimos nuestras fuerzas no podemos alcanzar nuestras metas, proyectos y propósitos”.
Aunque ‘Orobroy Romi’ es una asociación de mujeres gitanas, “trabajamos con todas las etnias que lo necesiten, tanto con familias gitanas como no gitanas y también con hombres y niños. Nuestras puertas están abiertas para todas las personas que lo necesiten”, explica su presidenta y fundadora.
“La mujer gitana es luchadora, valiente, emprendedora, con muchos sueños y está deseando poder proyectarse y realizarse como mujer y como persona”
Para Rocío Bustamante la educación es un pilar fundamental en la construcción de la igualdad y en el conocimiento de la historia del pueblo gitano: “Mi hijo de 11 años me dijo que sus compañeros de clase no saben nada de los gitanos, ni de su historia y él con su corta edad quiere que nos conozcan y quiere hablarles de nuestro pueblo”.
Rocío nos cuenta que la situación del pueblo gitano ha mejorado, pero que todavía existen problemas a nivel de empleo, educación y vivienda. “Que los gitanos tenemos corazón, tenemos alma y sentimientos. Y ya estamos cansados de estar arrastrando siempre los mismos estigmas, los mismos prejuicios, de estar chocando con ese techo de cristal que no te deja avanzar. Siempre tienes que demostrar que vales”, enfatiza la presidenta de ‘Orobroy Romi’.
LAS HERIDAS DEL ALMA
Rocío Bustamante es mediadora social y está llevando a cabo un proyecto educativo en el colegio San Fernando junto a Ana Isabel Bustamante Santiago, profesora de infantil y primaria, y especialista en religión evangélica en el CEIP San Fernando de Cuenca. En opinión de Ana Isabel Bustamante, existe mucho desconocimiento sobre la comunidad gitana hasta el punto de que “niños no gitanos han llegado a preguntarme qué comen los gitanos o qué idioma hablan”.
“Trabajo en el ámbito educativo y debería haber más mención a la cultura gitana, sobre todo en primaria. Al igual que hablamos de la historia de los Reyes Católicos, hay que explicar también que hubo una comunidad a la que expulsaron, y como desobedeció y hubo resistencia, aquí la sometieron y vivieron fatal. No solo es recordar las viejas heridas del alma, sino el porqué de los gitanos en España y en Europa”, reflexiona Ana Isabel Bustamante.
No se trata de recrearse en el victimismo, nos dice Ana Isabel, pero “ha llegado la hora de cerrar las heridas del alma y de abrir las puertas del corazón”. Solo si explicamos el pasado, afirma, podemos entender el presente.
Ana Isabel Bustamante, que enseña religión evangélica a alumnos de diferentes nacionalidades, dice que para romper con los estereotipos todavía imperantes se tienen que dar dos condiciones: “tiene que haber por mi parte buena conducta y por tu parte no puede haber juicio ni prejuicio antes de conocerme”.
Hoy por hoy no hay niños gitanos sin escolarizar, nos confirma Ana Isabel Bustamante. De hecho, “hay mamás que quieren guardar la plaza para que a partir de los cuatro años sus hijos estén escolarizados”.
Con motivo del Día Internacional del Pueblo Gitano y la conmemoración de los 600 años de la llegada del pueblo gitano a la península, Ana Isabel Bustamante pide que el sistema educativo sea “facilitador” con el fin de que los principios de “normalización y calidad de la educación” se hagan realmente efectivos.
ACTOS 8 DE ABRIL
‘Orobroy Romi’ realizará una exposición fotográfica en la Diputación Provincial sobre la cultura y costumbres del pueblo gitano, una muestra “en la que se van a visibilizar muchas cosas”.
"El acto central tendrá lugar en la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas, donde se va a leer un manifiesto, se va a cantar el himno gitano ‘Gelem Gelem; hablarán también los niños sobre lo que significa ese día, la profesora Ana Isabel hablará sobre la importancia que tienen las mujeres en la comunidad gitana y finalmente haremos entrega de una placa en honor a las mujeres mayores gitanas de Cuenca”, concluye Rocío Bustamante.