Cumpliendo con la tradición, Cuenca ha celebrado esta tarde la festividad de San Antón con una procesión y la bendición de animales. A pesar de las inclemencias del tiempo han sido numerosas personas las que han acudido con sus mascotas.
Perros, gatos, tortugas, hámsteres conejos y hasta corderos, engalanados para la ocasión, han recibido la bendición protectora del patrón en una jornada marcada por las lluvias que ha dejado el paso de la borrasca Irene.
Al final, el tiempo ha permitido la celebración. Eso sí, ante los chubascos que de forma dispersa han acompañado el inicio de los actos, han obligado a acortar la procesión del patrón a mitad de su recorrido por las calles del barrio.
También la bendición de los animales se ha realizado entre algunas gotas de agua a las puertas de la iglesia de la Virgen de la Luz, evitando así el barrizal que se ha formado en el parque de la Trinidad.
El alcalde, Darío Dolz, y varios concejales han continuado con el reparto de los 20.000 panecillos que el Ayuntamiento ha comenzado a dar esta mañana, posterior a la misa en a San Antón. Además, también ha habido una nutrida representación de la Corporación municipal durante el breve recorrido de la procesión que ha solemnizado la Banda Municipal de Cuenca.