Caso Morate
La Junta acusa a Morate de dos delitos de asesinato con agravante de razón de género en el caso de Marina
El letrado de la Junta, que ejerce la acusación popular en el caso Morate, se ha adherido este sábado a lo manifestado por el Ministerio Público, admitiendo tener la "certeza de que Sergio Morate asesinó a Marina y a Laura", después de escuchar casi un centenar de declaraciones a lo largo de la vista oral así como de la propia confesión que realizó el acusado "en multitud de ocasiones" a diferentes testigos, que también han pasado por la sala de vistas.
A su entender, Morate "tenía preparada la muerte de Marina única y exclusivamente, pero todo se le viene a pique cuando, en vez de Marina sola, llega también Laura". "Su idea era matar a Marina" después de toda una "cadena de comportamientos machistas" que, a juicio de este letrado, habría marcado la relación entre Sergio Morate y su exnovia, sobre la que "aumentó su control, privándola de su autonomía económica".
A su juicio, "creía tener motivos para matar a Marina, creía que se lo merecía y se ve desbordado en el momento en que aparece Laura", por lo que solo encuentra "componente de género" hacia su exnovia, ya que, incluso "después de matarla, estuvo cotilleando su móvil".
Tras sostener, como el resto de partes acusatorias, que las asesinó en el piso de la calle Río Gritos y que, minutos después, su amigo A.E., con quien pretendía acudir a un concierto en Alicante esa misma noche, lo encontró "blanco y sudado", las enterró en el paraje El Bodegón, en las proximidades del nacimiento del río Huécar a su paso por Palomera y "se fue tranquilamente de la escena del crimen". Dejó abandonados un pico, una azada, una maceta y una garrafa de agua con la inscripción Lourdes en los que no se encontró ningún tipo de huella "porque usó guantes", ya que tan solo se ha obtenido su perfil genético en la garrafa y "por donde se bebe".
Asimismo, el lerado ha hecho referencia a su huida posterior a Rumanía, donde también habría confesado los crímenes a unos amigos y ha considerado acreditado que en los hechos que se enjuician en la Audiencia Provincial desde el lunes concurren la agravante de violencia de género en el caso de Marina y de abuso de superioridad en el de Laura.