En estas fechas tan señaladas, uno de los momentos marcados de manera especial en el calendario de adviento conquense es, sin duda, la inauguración del belén del jardín de la plaza de la Hispanidad de la capital. Toda una tradición, a la que no ha faltado el alcalde de la ciudad, Darío Dolz, que ha acudido acompañado del concejal de Festejos, Mario Fernández, y de varios miembros de la Corporación municipal, y a la que también se ha sumado el subdelegado del Gobierno en Cuenca, Juan Rodríguez; y la vicepresidenta tercera de la Diputación Provincial de Cuenca, Nuria Illana.
El obispo de la Diócesis de Cuenca, José María Yanguas, se ha encargado de colocar el Niño Jesús en el belén para, a continuación, proceder a bendecirlo y desear a todos una feliz Navidad. El grupo Tiruraina, por su parte, ha amenizado un año este acto con la interpretación de varios villancicos populares, que han hecho las delicias de los numerosos conquenses, que se han dado cita en esta tradicional inauguración navideña.
Apertura del belén que ha venido precedida de más música. Y es que desde las cinco de la tarde, tanto Tiruraina como la Escuela Municipal de Música o las Esclavas Carmelitas de la Sagrada Familia han deleitado a cuantos ciudadanos deambulaban por la zona de Carretería e Hispanidad interpretando una selección de villancicos, con la que han contribuido a reforzar el ambiente navideño en el centro de la ciudad.
La jornada del sábado se ha completado con los recitales de villancicos del grupo Voces y Esparto en el Centro Cultural Aguirre y del Coro del Conservatorio de Cuenca en la iglesia del Convento de las Concepcionistas, en plena Puerta de Valencia.
