El Grupo Municipal Socialista ha criticado que el muro levantado para delimitar la construcción de un edificio en la calle Calderón de la Barca “se come” la mitad del acerado, lo cual implica “serias” dificultades para el paso de peatones.
Tal y como les han transmitido algunos usuarios, “se ve con toda claridad la invasión del acerado”, lo que supone que los viandantes tienen que bajar en ocasiones al asfalto por no tener espacio para pasar con el consiguiente riesgo de atropellos. Una situación que se agrava en aquellos casos en que se camina con sillas de ruedas, carros de bebé o carros de la compra.
La “chapuza” del Ayuntamiento de Cuenca se deja ver además con la señal de tráfico que ha quedado dentro del muro y asomando levemente a la calle, lo que “viene a demostrar la falta de interés del alcalde Mariscal por haber planteado este asunto con algo de previsión”.
La “chapuza” del Ayuntamiento de Cuenca se deja ver además con la señal de tráfico que ha quedado dentro del muro y asomando levemente a la calle, lo que “viene a demostrar la falta de interés del alcalde Mariscal por haber planteado este asunto con algo de previsión”.