Las fuertes rachas de vientos como consecuencia de la borrasca Helena ha tenido consecuencias en la capital conquense. En un vídeo subido a las redes por una de las jugadoras del club de Liga Regional Femenina, Pozo de Las Nieves, se podía ver como parte del alto vallado del campo de fútbol del Obispo Laplana, lugar donde habitualmente entrena y juega el equipo, había sido derribado como consecuencia del temporal.
El equipo llegaba a la instalación este sábado para jugar su partido contra el CD Azuqueca correspondiente a la 18ª jornada de Liga Regional Femenina. Tal y como ha explicado el cuerpo técnico del equipo, las jugadoras llegaron al campo para jugar el partido a las 15:00 horas, antes de pasar a vestuarios, el propio conserje de la instalación recomendó no jugar debido al estado del vallado. Instantes después, la verja metálica de uno de los fondos del campo ya se encontraba casi derrumbada de cara al campo, por lo que ambos equipos no pudieron jugar el partido hasta 45 minutos después, desplazándose hasta los Tiradores.
Desde el club han mostrado su profundo malestar por la precaria situación no sólo del campo, donde denuncian que el mal estado del terreno de juego es un potenciador de lesiones en las jugadoras, sino del estado de accesos, gradas y mobiliario del campo, como el vallado derrumbado por el viento al igual que las barras de hierro que rodean el terreno de juego, desprovistas de protecciones acolchadas.
La provincia conquense se encontraba este viernes y sábado en alerta por nieve con cotas por debajo de los 1000 metros, además de avisos amarillos por fuertes vientos,