Con dos minutos de silencio en recuerdo de las víctimas mortales de la COVID-19 y de la violencia de género y con la presencia de 14 concejales, el Ayuntamiento de Cuenca ha iniciado este martes un pleno extraordinario con el que reanuda la actividad después de dos meses sin sesiones plenarias debido a la crisis sanitaria.
Y lo ha hecho con un pleno, tal y como lo ha recalcado al inicio el alcalde, Darío Dolz, centrado en la ratificación de las muchas decisiones que ha tenido que tomar el equipo de Gobierno con el fin de adaptarse a la situación derivada de esta pandemia.
Medidas como, por ejemplo, la habilitación del Fondo COVID-19 para hacer frente a gastos derivados de la emergencia sanitaria, como la adquisición de material de protección ante el coronavirus o atender las situaciones de necesidad de aquellos colectivos más vulnerables agravadas por la pandemia. Fondo que se dotó con 113.000 euros en un primer momento y que se complementó posteriormente con otros 100.000 hasta alcanzar un montante total de 213.000 euros.
Ratificación de estas dos modificaciones de crédito que, precisamente, han copado en gran medida las dos primeras horas de este pleno extraordinario. Y es que la disparidad de opiniones sobre cómo se ha gestionado la puesta en marcha de este fondo ha quedado más que patente, hasta el punto de que no se ha registrado unanimidad en torno a esta cuestión.
De hecho, los decretos por los que se han efectuado ambas modificaciones de crédito, una de 113.000 euros y otra de 100.000, se han aprobado con los votos a favor de PSOE, Cuenca Nos Une y Cuenca en Marcha, mientras que PP y Ciudadanos (Cs) han votado en contra, poniendo así en entredicho las formas, que no el contenido, de cómo se ha efectuado esa dotación económica.
El concejal de Hacienda y Seguridad Ciudadana, Juan Manuel Martínez Melero, ha explicado que la primera modificación de créditos por importe de 113.000 euros procede de la reducción en 45.000 euros de la aportación del Ayuntamiento a la Semana de Música Religiosa de Cuenca (SMR), la utilización de los 60.000 euros previstos para colaborar con la Junta de Cofradías en la celebración de la Semana Santa 2020 y la detracción de 8.000 de la partida de comunicación.
Operación que ha recibido el respaldo de Cuenca Nos Une y Cuenca en Marcha, si bien sus portavoces, Dámaso Matarranz y María Ángeles García, han querido matizar ese apoyo, el primero preguntando si se ha informado a los afectados de la retirada de esos fondos y la segunda mostrando su inquietud sobre la disposición de dinero suficiente en caso de que finalmente se celebre en diciembre una edición “acortada” de la SMR. Cuestiones a las que el equipo de Gobierno ha respondido asegurando, por un lado, que desde las concejalías competentes se ha contactado con los afectados por estas medidas y, por otro, remarcando que aún quedan 60.000 euros en esa partida del Ayuntamiento para la celebración de la SMR.
Desde las filas de populares y Ciudadanos han esgrimido motivos jurídicos para no dar su apoyo a ambas modificaciones de crédito. Y es que tanto Cristina Fuentes como José Ángel Gómez Buendía consideran que la detracción de 45.000 euros de la partida municipal a la SMR va en contra del compromiso plurianual adquirido por el Ayuntamiento con este festival de música religiosa en 2017.
Y en esta línea, el popular Gómez Buendía ha ido más allá y ha hablado de “ilegalidad”, aduciendo que no se han respetado los trámites preceptivos, al tiempo que ha recordado que el Estado de Alarma no contempla entre sus excepciones lo que ha hecho el equipo de Gobierno, tan solo incluye ante este tipo de situaciones la utilización del remanente de tesorería; algo que, precisamente, no es lo que se ha hecho aquí.
Argumentos, entre otros, que han vuelto a poner sobre la mesa cuando se ha abordado en el punto cuarto del orden del día la ratificación del decreto correspondiente a la segunda modificación de créditos, en esta ocasión, por valor de 100.000 euros.
La concejal de Régimen Interno, Personal y Coordinación Institucional, Saray Portillo, ha sido la encargada de explicar de dónde se han sacado esos 100.000 euros. Importe que resulta de haber detraído 80.000 euros de la partida de Festejos ante la probabilidad de que finalmente no se celebren las Fiestas de San Julián y San Mateo, lo que ha originado un intenso debate sobre la cuestión, y los otros 20.000 de la partida de seguros.
AGOSTO HÁBIL
Al igual que la suspensión o no definitiva de las Fiestas de San Julián y San Mateo de este año se ha colado en el debate de una de las modificaciones del créditos para dotar el Fondo COVID-19 a pesar de no estar dentro del orden del día, la decisión de que el mes de agosto sea este año hábil a efectos administrativos ha irrumpido en el debate sobre la ratificación de los decretos por los que el equipo de Gobierno ha suspendido los Plenos de marzo y abril.
Aunque no era el momento para hablar de tal posibilidad, todos los grupos políticos se han mostrado de acuerdo en que así sea, aunque la decisión no se pueda abordar hasta el próximo Pleno ordinario del 28 del presente mes de mayo. No obstante, el primer edil ha instado a los grupos a que realicen la solicitud formalmente para que se incluya en la próxima sesión plenaria; algo en lo que no ha tardado el Grupo Popular, que ha anunciado durante la sesión que ya había registrado una propuesta en este sentido.
Al final, lo que sí se podía debatir en este pleno extraordinario, es decir la ratificación de los decretos municipales de suspensión de las sesiones ordinarias de marzo y abril, recibió el visto bueno de los ediles de PSOE, Cuenca Nos Une y Cuenca en Marcha, mientras que PP y Ciudadanos han preferido abstenerse.