El equipo de Gobierno Municipal de Cuenca ha querido dar cuenta este jueves de manera detallada en sesión plenaria de las gestiones acometidas, tanto por el Ayuntamiento como por el Consorcio de la Ciudad de Cuenca, en torno a la calle Canónigos, en lo que han calificado como “un claro ejercicio de transparencia”. Y es que tanto la concejala de Urbanismo, Nelia Valverde, como el edil de Patrimonio, Miguel Ángel Valero, que han sido los encargados de la exposición de hechos, han coincidido en resaltar que “esta dación de cuentas ha sido a iniciativa del propio equipo de Gobierno”.
Ambos ediles han detallado pormenorizadamente todos y cada uno de los pasos dados desde septiembre de 2019, cuando el Consistorio detectó que el hundimiento del pavimento de la calle Canónigos se había acrecentado, hasta las gestiones posteriores al hundimiento del muro de contención el pasado mes de mayo. Un periodo de 20 meses en el que, tanto Valverde como Valero, no han dudado en subrayar que desde el Ayuntamiento y el Consorcio no se ha dejado de trabajar, priorizando en todo momento la actuación en esta calle ante su progresivo deterioro. Una gestión que han calificado como “incesante, transparente y diligente”.
De esta manera, la titular de Urbanismo ha relatado cómo el Ayuntamiento ha estado encima de este asunto desde un principio, primero detectando el problema en septiembre de 2019, pidiendo informes externos para evaluar la situación y ejecutando en noviembre unos primeros trabajos de emergencia, después intentando agilizar la redacción del proyecto de las obras de reparación del muro, sustitución del colector de saneamiento y reposición del pavimento de la calle Canónigos con su encargo en febrero de 2020 a la empresa pública Aguas de Cuenca, y finalmente poniendo a disposición del Consorcio de la Ciudad de Cuenca dicho proyecto el 21 de julio.
Valero, por su parte, que se ha centrado en las gestiones del Consorcio con este asunto, ha recordado que el presidente del mismo y alcalde de la ciudad, Darío Dolz, ha insistido a lo largo de estos veinte meses en distintas reuniones de la Comisión Ejecutiva de este organismo en la necesidad de priorizar la ejecución de estas obras en la calle Canónigos, las que finalmente daban comienzo el 26 de abril del presente ejercicio y en las que se produjo el derrumbe del muro el 12 de mayo. Una insistencia que, a su juicio, viene a denotar que no solo no ha habido dejadez en esta cuestión, sino que se ha trabajado diligentemente hasta el punto de que se ha apremiado a agilizar los trámites cuando se vislubraba algún retraso.
OPOSICIÓN
Los tres grupos de la oposición, por su parte, han coincidido en reprochar al equipo de Gobierno que la información facilitada sobre la gestión en torno a las obras de la calle Canónigos es “incompleta” al no haberse incluido, tal y como han recalcado, desde algunos de los informes citados sobre la situación de esta calle, tanto externos como del propio Servicio de Obras, hasta el expediente de contratación del proyecto de la última intervención.
Asimismo, no han dudado en afear el hecho de que dicha información se les haya facilitado este miércoles a última hora de la mañana, sin contar con tiempo suficiente para estudiarla, analizarla y, de esta manera, pedir responsabilidades en caso de detectar alguna anomalía. Es por ello que han puesto en entredicho el “ejercicio de transparencia” que dice haber demostrado el equipo de Gobierno con esta dación de cuentas, al tiempo que desde el Grupo Popular, su portavoz, José Ángel Gómez Buendía, ha ido más allá y ha afeado al equipo de Gobierno el tiempo empleado para iniciar las obras en la calle Canónigos, “convirtiendo un procedimiento urgente y de emergencia en uno ordinario de 20 meses de duración”.