La empresa Serbatic, que abrió sus puertas en Cuenca el año pasado con 25 personas y cuya apertura respaldó el Gobierno de Castilla-La Mancha, ya cuenta en su plantilla con 65 trabajadores, todos ellos titulados en Grado o Ciclo Superior de FP, el 75 por ciento de los cuales, son de Castilla-La Mancha.
El objetivo de este centro tecnológico es generar equipos capacitados en las tecnologías más demandadas que permanezcan mucho tiempo en Castilla-La Mancha, manteniendo el conocimiento, la capacidad tecnológica y optimizando los procesos de trabajo. De esta forma, pretenden proveer a sus clientes de los servicios tecnológicos que demandan de una forma más eficiente, con un equipo estable y especializado, según informa la Junta.
La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, ha visitado la sede de la empresa en Cuenca y felicitado a los responsables ante el crecimiento que, en menos de un año, ha experimentado la empresa y ha confiado en que sirva de ejemplo para que nuevas empresas elijan a Castilla-La Mancha como destino de inversión.
Serbatic estima un volumen de negocio de 3,5 millones de euros en 2019, siendo un 30 por ciento del volumen previsto para la compañía ese año. Serbatic es una filial del Grupo VASS (‘VASS Consultoría de Sistemas’), una consultoría IT especializada en nuevas tecnologías e integradora de productos y servicios de alta complejidad. Fundada en 1999, se trata de una multinacional 100 por cien privada con presencia internacional en países como el Reino Unido, Estados Unidos, Colombia, México, Perú, Brasil o Chile.
El pasado año facturó en torno a 92 millones de euros. Además, la compañía destina un 2 por ciento a acciones solidarias y los trabajadores el 1 por ciento de su tiempo. En la actualidad, cuenta con más de 1.200 empleados.
Tienen como clientes a grandes empresas como Repsol, Telefónica y en la Administración, a la Generalitat de Cataluña o el Senado de España.
Tras las conversaciones mantenidas con el Gobierno regional, la empresa decidió instalarse en Cuenca después de realizar un riguroso estudio de mercado en el que el nivel de cualificación de los jóvenes de la comunidad autónoma, la posición geográfica y el apoyo del Gobierno regional a los proyectos de creación y consolidación empresarial, jugaron un papel preponderante a la hora de tomar su decisión.
