Empleos que no son lo que eran

El mercado laboral ha sufrido históricamente numerosos cambios como consecuencia de la aparición de nuevos hábitos, el progreso, el desarrollo o la innovación tecnológica, con sectores que en un momento determinado han estado en alza y, de repente, han caído en picado, mientras que, de forma a veces paralela, ha habido sectores que han aprovechado las nuevas circunstancias para generar riqueza y empleo.

En los últimos años, la mayor parte de los cambios están relacionados con los avances tecnológicos: internet y los servicios on-line han reducido las necesidades de personal para atender al público en sectores como la banca, el comercio o la administración pública.

Las entidades financieras son las más damnificadas: según datos de CCOO, en los últimos diez años han perdido 450 puestos de trabajo en la provincia, el 33 por ciento del total. Para el secretario territorial de UGT, José Azcoitia, se trata de una realidad “impensable” hace un par de décadas, cuando la banca “parecía totalmente estable”.

"Nos están inculcando autoservicio, que resulta más incómodo, cuando el precio que cobran es el mismo"

La apuesta por las consultas y trámites on-line en detrimento de la atención presencial dificulta además el acceso a sus cuentas a una población como la conquense, muy envejecida y alejada de las nuevas tecnologías. Algo muy parecido a lo que está sucediendo en las grandes superficies, donde cada vez son más las cajas registradoras que no cuentan con cajera y es el propio cliente el que debe pasar el código de barras de cada producto y realizar el pago con tarjeta. “Nos están inculcando el autoservicio, que resulta más incómodo, cuando luego el precio que cobran es el mismo”, incide Azcoitia.

María José Mesas, secretaria general de CCOO, lamenta también esta “pérdida de cercanía” aunque considera que se trata de “una nueva realidad” a la que “no podemos negarnos”, ya que entiende que incluso el dinero físico está destinado a desaparecer, por lo que aboga por aprovechar los avances tecnológicos como “oportunidad” para el desarrollo empresarial y la generación de empleo, sobre todo en el medio rural de la provincia.

Correos

Otro sector que está perdiendo puestos de trabajo es el servicio postal, donde junto al uso de las nuevas tecnologías sobresale la competencia de las empresas privadas de paquetería, que según advierten en UGT crean un empleo “más precario, con muchos trabajadores que no están contratados por cuenta ajena, sino que son falsos autónomos”.

A ello hay que añadir el crítico momento que atraviesa el comercio tradicional, que ha perdido 1.200 empleos en los últimos años, lo que ha llevado a la patronal a movilizarse para que la población conquense se conciencie de la necesidad de consumir en Cuenca en vez de hacerlo en grandes ciudades como Madrid y Valencia o vía on-line. “El pequeño comercio ha tenido históricamente una labor muy importante en la generación de empleo y riqueza. Y es algo que podemos contribuir a a mantener consumiendo en Cuenca en vez de que el dinero se vaya a grandes empresas de fuera”, sostiene el secretario territorial de UGT.

"Los servicios que requieren de un contacto directo van a tener que seguir teniendo a las personas ahí"

Otros sectores como el de la imprenta han sufrido también una importante pérdida de empleo en los últimos años ante la proliferación de lo digital frente al papel, un hecho que también a afectado a los periódicos: de los off-line se ha pasado a la primacía de los digitales, que funcionan con plantillas mucho más reducidas. También el campo, con los nuevos avances tecnológicos, se necesita menos mano de obra.

Los talleres de reparación de automóviles también se han visto afectados: el avance tecnológico de las piezas de los nuevos vehículos dificulta su reparación, de modo que tienen que ser sustituidas por piezas nuevas o ser enviadas a un centro especialista. El trabajo mecánico es, así, cada vez menor. Algo que desde hace muchos más años ocurre con los electrodomésticos: es más económico y sencillo sustituir la televisión o la tostadora deteriorada por una nueva que llevarla a arreglar (si es que quedan empresas de reparación).

Entre los pocos sectores que no se ven afectados por la tecnología está la hostelería: ni el café de máquina ni los expendedores de bebidas pueden equipararse a los bares, donde los camareros que sirven al cliente un café, una caña o un refresco, son insustituibles. “Todos los servicios que requieren de un contacto directo van a tener que seguir teniendo a las personas ahí”, subrayan en CCOO.

Nuevos Yacimientos

Hay no obstante motivos para la esperanza en el empleo que se está generando en el campo del desarrollo tecnológico y las aplicaciones informáticas, lo que hace año y medio llevó a la empresa Serbatic a instalar un centro en Cuenca que cuenta ya con medio centenar de trabajadores, un camino que se espera que pueda ser seguido por nuevas compañías, como Future Space: en Cuenca pueden hacer el mismo trabajo que en Madrid o Valencia a menor coste y con una mejor calidad de vida.

Aprovechar los recursos forestales de la provincia para generar pellet es otra de las oportunidades que según los expertos brindan los nuevos tiempos. “Son recursos que tenemos que aprovechar explotándolos aquí, transformándolos, para que Cuenca acoja toda la cadena de fabricación y no quedarnos solo en la primera parada”, concluye Azcoitia.