Morate
La defensa de Morate pide que el jurado sea incomunicado o que el juicio se celebre a puerta cerrada
El abogado defensor de Sergio Morate Garcés, acusado de asesinar el 6 de agosto de 2015 a su exnovia Marina Okarinska y una amiga de esta, Laura del Hoyo, ha solicitado que, a lo largo de la vista oral, el jurado permanezca incomunicado o que el juicio se celebre a puerta cerrada para evitar la contaminación de los mismos y garantizar su imparcialidad.
La primera sesión de la vista oral ha arrancado con la lectura de un escrito que la defensa de Sergio Morate presentó en este sentido el viernes 19 de octubre, tras la constitución del Tribunal del Jurado que le enjuiciará hasta el próximo viernes y según el cual varios miembros del mismo admitieron haber sido influenciados por los medios de comunicación a fin de considerar culpable a Sergio Morate del doble asesinato, por lo que, ante la nueva situación generada a los efectos de imparcialidad, solicita la incomunicación del jurado durante las sesiones de celebración del plenario para evitar su contaminación o la celebración del plenario ante el Tribunal del Jurado a puerta cerrada.
Con ello, la defensa busca garantizar la imparcialidad e independencia a la hora de emitir su veredicto, circunstancia de incomunicación que, ha alegado, debe hacerse extensible a los suplentes ante la existencia de una “presión exterior” referida por los miembros del tribunal del jurado.
Según la defensa, la práctica totalidad de los jurados han manifestado durante su constitución encontrarse influenciados en el sentido de considerarle como autor del doble asesinato así como que su objetividad se encuentra igualmente contaminada en el mismo sentido.
Su justificación de la celebración de las sesiones a puerta cerrada, va en el mismo sentido de garantizar la tranquilidad de los jurados a la hora de tomar su decisión con responsabilidad.
A este respecto, el Ministerio Fiscal ha detallado que la Constitución reconoce el derecho a un juicio público y que el principio de publicidad es un derecho de la sociedad y del propio acusado, que queda recogido en la Constitución así como en la Ley de Enjuiciamiento Criminal. La publicidad se regula, recuerda la fiscal, para preservar los derechos del acusado y la intimidad de las víctimas.
En cuanto a las excepciones, a su juicio no hay razón de orden público que justifique que, por razones de seguridad, este se celebre a puerta cerrada y sin presencia de medios de comunicación.
El derecho a la intimidad de la víctima y el respeto debido a la misma y su familia, para su protección, podrían, no obstante, determinar la posibilidad de celebrarlo a puerta cerrada, aunque las familias de ambas víctimas, ha puntualizado, están debidamente representadas.
Tras subrayar que unos procedimientos, ha subrayado el Ministerio Fiscal, se hacen más o menos mediáticos, ha advertido de que cabe la posibilidad de que las acusaciones particulares puedan solicitar su celebración a puerta cerrada y ha recordado que los jurados solo pueden basarse exclusivamente en la valoración de las pruebas que se practiquen en sede judicial.
El único momento en que la Ley del Tribunal del Jurado determina la total incomunicación es el de la deliberación, previa a la emisión del veredicto y una vez celebrada toda la prueba y los jurados hayan recibido el objeto de veredicto, que tendrán que contestar en relación con lo que se practique en sede judicial, por lo que, a su entender, no procede que estén incomunicados desde el principio.
La defensa de Marina ha considerado “una estrategia” la petición del abogado de Morate, por lo que no la considera apropiada. La defensa de Laura del Hoyo, por su parte, no ha descartado que, en momentos determinados, especialmente sensibles, se pueda solicitar que el juicio prosiga a puerta cerrada y, en cuanto a la incomunicación de los jurados, a su entender deben ser ellos los que, en su caso, la soliciten.
El letrado de la Junta de Comunidades, que se persona como acusación popular, ha espetado que los medios solo van a reproducir lo que pase en el interior de la sala de vistas y ha asegurado que el jurado popular se dejará llevar por lo que pase dentro y no por lo que digan los medios.
Una vez oídas todas las partes, el juicio ha entrado en un periodo de receso para que los jurados deliberen.
EL JURADO NO LO CONSIDERA NECESARIO
Tras esta petición de la Defensa, el presidente del Tribunal del Jurado ha asegurado que los jurados son “personas lógicas, capaces de tomar decisiones basándose únicamente en las pruebas expuestas” y no en la información que hayan podido consultar “en redes sociales o medios de comunicación”.
Respecto a la celebración de la vista oral a puerta cerrada, consideran la “no necesidad de que así sea, excepto cuando se traten temas delicados que puedan afectar a las víctimas”.
La primera sesión ha sido suspendida durante cuarenta y cinco minutos en tanto el magistrado presidente de la sala, José Eduardo Martínez, decide acerca de la conveniencia o no de atender a la petición de la defensa de Sergio Morate, que ha sido desestimada por el resto de partes personadas en el proceso.