El Encuentro Hispanoamericano de brigadistas que está teniendo lugar estos días en Bariloche –Argentina- cuenta con una pequeña representación conquense que, además, es conocida en el mundillo del deporte. Encarnación Montes ‘Cani’ –jugadora del Club Rugby A Palos Femenino- y David Cuesta –exentrenador del Rugby A Palos Masculino- son dos de los componentes del SOS Wildfire que comparte en tierras argentinas experiencias en común con brigadas de distintos países de Latinoamérica.
Cani, miembro de las BRIF -Brigadas de Refuerzo de Incendios Forestales- que lamentablemente no ha podido acudir a este encuentro, explica que SOS Wildfire, superando por poco el año de vida, nace como una ONG que se asemejase a una especie de Bomberos Forestales Sin Fronteras. Sin ánimo de lucro, trata de dar respuesta a los grandes incendios que se han producido en los últimos años no solamente en España, sino también en Grecia, Italia, Portugal, Australia, Estados Unidos, Canadá… que cada vez son más vastos y afectan con una mayor gravedad. Aprovechando que en España se dispone de una buena formación y especialización en lo que a extinción de incendios se refiere, SOS Wildfire acaba por constituirse debido a los incendios en la Amazonía Boliviana, manteniendo así el contacto con asociaciones de la zona.
Lo que en principio estaba previsto como un encuentro entre las brigadas de España y Argentina ha acabado por convertirse en todo un encuentro internacional al que se han sumado México, Bolivia, Chile, Ecuador…. Así, en este punto de unión se comparten experiencias, técnicas, recopilación de materiales, análisis y distintas perspectivas acerca de cómo frenar los incendios forestales.
“Es una experiencia que les está enriqueciendo muchísimo, están aprendiendo un montón”, expresa Cani, haciendo extensible este enriquecimiento a todas las brigadas que participan en el encuentro. Asimismo, recalca que SOS Wildfire está abierto a todo el mundo, contando entre sus filas con gente de toda España en distintas parcelas, como pueden ser pilotos, técnicos operativos, técnicos de administración, bomberos… Toda ayuda es poca para luchar contra los incendios forestales que azotan con más violencia en los últimos años.
