“Tú puedes ayudar”. Ese es el mensaje que se ha lanzado en el acto institucional celebrado este viernes en la Diputación de Cuenca con motivo del Día para la Eliminación de la Violencia de Género, en el que se ha hecho un llamamiento a la sociedad para “pasar a la acción” contra esta problemática que se ha cobrado la vida en lo que va de año de dos mujeres en la provincia de Cuenca.
En el acto han participado representantes de las distintas administraciones –Diputación, Ayuntamiento, Gobierno regional y Subdelegación del Gobierno–, de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de diferentes estamentos de la sociedad conquense, haciendo frente común contra la violencia machista y poniendo el acento en que todos podemos ayudar contra esta lacra.
Coincidiendo con la campaña de visibilización específica sobre violencia de género en mujeres de más de 65 años que ha puesto en marcha la Diputación de Cuenca bajo el lema ‘La violencia de género no tiene edad’, la encargada de leer este año el manifiesto del 25N ha sido Pilar Villanueva, representante del Consejo de Consejo Provincial de Personas Mayores y vecina de Saelices.
En el acto, en el que se ha guardado un minuto de silencio por las dos víctimas de género de este año en la provincia –una en Nohales y otra en Tarancón– y sus huérfanos, se ha recordado que desde que se tienen registros en 2003, 1.171 mujeres han sido asesinadas en el país a manos de sus parejas o exparejas, 38 de ellas este año, cinco de las cuales en Castilla-La Mancha.
Por ello, en la lectura del manifiesto se ha hecho hincapié en que estas mujeres merecen todo el “esfuerzo” y “compromiso” de las instituciones y de la sociedad frente a la violencia machista, que hace “tambalear los pilares de nuestra democracia”.
En el acto también se ha aludido a la violencia sexual y la vicaria –la ejercida contra los hijos para causar el mayor daño a las mujeres–, recordando también a aquellas que son aún más vulnerables frente a la violencia machista como las migrantes, las de entornos rurales y las mayores.
El manifiesto también ha lanzado la mirada hacia lo que sucede en otras partes del mundo, refiriéndose a otras formas de violencia que sufren las mujeres como la trata con fines de explotación sexual, la mutilación genital y los matrimonios forzados de niñas.
Por todas estas razones, Villanueva ha recalcado que la lucha contra la violencia machista “no es una opción sino una obligación democrática” y ha pedido seguir trabajando en políticas públicas que hagan frente a la problemática y protejan a las víctimas.
Para finalizar, se ha subrayado que no es posible una democracia sin libertad para las mujeres y se ha hecho un llamamiento a la responsabilidad compartida como sociedad para hacer frente a la violencia machista, animando a todos a “pasar a la acción”: “Tú puedes ayudar”.
