Cuenca, lugar único para observar la alineación de los 7 planetas
Astrónomos y aficionados están de suerte y tienen una cita este 28 de febrero con la observación del firmamento y es que ese día, cuando empiece a caer el sol, podrán contemplar un fenómeno único de alineación planetaria que no se repetirá hasta el año 2492. Por primera vez en mucho tiempo, todos los planetas del Sistema Solar van a estar metidos en “un juego único del movimiento celeste”, que comenzaba ya este martes.
José María Sánchez, astrónomo del Museo de las Ciencias de Castilla-La Mancha, nos cuenta que “alineación de planetas hay todos los días”, pero que en esta ocasión va a tener algo verdaderamente interesante: todos los planetas estarán sobre el horizonte a la vez. “Lo que esta alineación tiene de especial es que a la misma hora de la noche, es decir, nada más anochecer, podremos ver absolutamente todos los planetas del Sistema Solar en una franja de 120 grados. En un tercio de cielo y en un tercio de esa línea imaginaria es donde vamos a tener todos los planetas”.
La alineación de los siete astros es un “efecto visual” que ocurre cuando varios planetas parecen agruparse en el cielo desde la perspectiva de la Tierra. “¿Qué va a ocurrir? Vamos a tener en esa franja todos los planetas del Sistema Solar. Una vez anochezca, Mercurio y Saturno se van a ver muy bajos en el horizonte porque son planetas que están cerca del Sol. Rápidamente se van a esconder y entonces seguiremos viendo el resto. Vamos a ver Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno. Tenemos que esperar hasta el 2492 para tener una alineación similar”, afirma Sánchez.
Lo que comenzaba este 25 de febrero es una alineación planetaria, algo que no debemos confundir con una conjunción planetaria, hecho que desde una perspectiva astronómica puede resultar algo más interesante. “En una conjunción, desde el punto de vista del observador, parecen estar en la misma línea todos los objetos, es decir, tienes todos los planetas apretados en una pequeña zona del cielo. Si desde la mirada del observador, siguiendo la misma línea, hay varios objetos, se dice que están en conjunción”, comenta José María Sánchez.
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La alineación planetaria va a permitir que desde el 25 al 28 de febrero los interesados en el fenómeno puedan recibir “explicaciones muy didácticas” sobre todos los planetas del sistema solar en un intervalo de tiempo corto. “Vamos a hacer algo específico en la ciudad y es que aprovechando el Cielo del mes, el miércoles 26 de febrero pondremos los telescopios a las siete y media de la tarde, tanto los telescopios de la Agrupación Astronómica de Cuenca, que es la que coordina la observación, como los que tenemos en el Museo. De una forma didáctica haremos que los asistentes observen visualmente, que localicen los objetos y explicaremos cualquier duda sobre estrellas y planetas”.
Cuenca y su cielo especial
Destino Turístico Starlight, la Serranía de Cuenca va a ser un lugar privilegiado para la observación de este momento único “por sus cielos sin contaminaciones y sus noches cada vez más despejadas”. De hecho, Cuenca tiene uno de los cielos menos contaminados de Europa. “A nivel mundial, cuando hacemos fotografías desde satélite de zonas de contaminación lumínica baja o zonas negras que están contaminadas mucho, Cuenca tiene la segunda zona más grande no contaminada en Europa. Tenemos una de las zonas más ricas de cielos oscuros”, en palabras de Sánchez.
El consejo de los expertos para disfrutar del espectáculo celeste del 28 de febrero es el de buscar “un horizonte oeste muy despejado de árboles, lo más alto posible para que ni la topografía, ni los elementos que haya, dificulten la observación de Mercurio y Saturno. Si el horizonte está despejado se podrá disfrutar del resto sin problemas”.
Habrá que anotar otras dos fechas más en las que disfrutar del firmamento. El día 29 de marzo de 2025 habrá un eclipse parcial de Sol y el 12 agosto de 2026 podremos disfrutar de un eclipse total de Sol que pasará por la provincia de Cuenca. La última vez que se pudo ver fue el 8 de julio de 1842.
