Miles de personas inmigrantes en situación de vulnerabilidad se enfrentan cada día a situaciones adversas solo por tener otra nacionalidad. Para combatir la desinformación, la desigualdad y los tabúes que rodean a otras culturas diferentes a la nuestra, Cruz Roja Cuenca desarrolla un programa de actividades para favorecer la interculturalidad.
Junto al Instituto de Educación Secundaria ‘San José’ y a dos voluntarias de la entidad humanitaria se ha llevado a cabo un taller titulado ‘Mitos y Bulos sobre la Inmigración’, enmarcado dentro del programa ‘Integración de Personas Migrantes’. Un ejercicio de reeducación en el que un total de 44 alumnos de tercero de la ESO pudieron aprender de la mano de la Educadora Social Marta Montero.
EL PROYECTO
Esta actividad socioeducativa está planteada dentro del ciclo ‘Personas del Mundo’, en colaboración con la Biblioteca Pública Fermín Caballero. Se trata de una iniciativa que persigue “mejorar la imagen pública de los inmigrantes en la ciudad y fomentar la buena convivencia porque normalmente se les rechaza”, señala Noelia Moreno, Técnico de la organización sociosanitaria.
Formulada dentro de la asignatura ‘Valores Éticos’, los propósitos de las voluntarias de Cruz Roja son detectar noticias falsas, desarrollar la empatía y generar debate. “Nos llevamos una grata sorpresa al ver que los chavales sabían más de lo que pensábamos”, comenta Marta Montero.
LOS ALUMNOS
Esta actividad que los alumnos definen como “una experiencia en la que hemos aprendido de forma divertida”, supone conocer como ha evolucionado su manera de pensar de cara a otros compañeros de clase y al resto de la sociedad. “Esperamos repetir pronto sobre este u otros temas”, comenta Aurora Sabariego, profesora. Estos adolescentes han reforzado sus conocimientos y por ello las alumnas Esther y Laura dicen haber aprendido “que no todos los inmigrantes vienen ilegalmente y somos conscientes de que somos privilegiadas por haber nacido en España”. Hacer torres con palillos largos y cortos divididos por grupos es otra de las tareas que desde Cruz Roja enuncian y “al intentar construir los edificios hemos visto como afecta no tener los mismos recursos”, apostilla la alumna Herena.
Lenuta de Rumanía y Yiomar de República Dominica explican desde sus circunstancias que “la inmigración sigue viéndose mal y continua habiendo racismo”, aunque seguros de sí mismos confiesan no haber hecho caso de los comentarios que han sufrido desde que llegaron a España.
Esta iniciativa, cuyo fin es incidir fundamentalmente en los jóvenes y su entorno, es sinónimo de compromiso con la integración de las personas migrantes a través de la implicación de todas las partes. Aurora Sabariego, reitera que “son actividades cada vez más necesarias porque hay sectores políticos más irresponsables que están dando una imagen sobre la inmigración muy negativa”. Una situación que merece la atención y reflexión no solo de los jóvenes sino de toda la sociedad.